Mirad lo que dice la que ha preparado el alimento:
Mi resultado espontáneo: No vale la pena. Es mucho trabajo/tiempo para poco rendimiento, y mucha energía/ horas de hornear. Además habrá que practicar más veces para llegar a un pienso que no tenga esta superficie tan crujiente / anguloso. Me imagino que puede incluso doler a las encías, sobre todo a aquellos gatos con la boca enferma. Y los que no tienen dientes no creo que lo van a poder tocar.
A ver con el tiempo si lo prueban de vez en cuando.
En cualquier caso, me parece interesante que haya un interés en este tipo de recetas, especialmente si se hacen con responsabilidad (la que lo preparó añadió VegeYeast y VegeCat).
Desgraciadamente, hay países (como varios de Hispanoamérica) donde adquirir el pienso vegano no es una opción.