Personalmente, estas contradicciones me hacen creer que esos principios todavía están en ti y que existe un problema a solucionar que es el que está, en cierta medida, nublando dichas convicciones. Bajo mi punto de vista, este es la supuesta monotonía de la dieta vegetariana y la relativa ausencia de platos cómodos e interesantes (platos rápidos).
Y, honestamente, este es un problema fácilmente salvable.
En mi caso, mi situación personal evoca bastante ciertas condiciones de la tuya, como lo son la escasez de tiempo para preparar platos o un difícil acceso a alimentos no comunes en una despensa omnívora.
Desde que pase de ser omnívoro a ovolactovegetariano y, de ahí, a vegano, me he dado cuenta de que gran parte de las recetas existentes incluyen una cierta cantidad de ingredientes peculiares y un tiempo de elaboración medio; considero que esto es debido a todo lo contrario de lo que nos ocupa (tiempo e ingredientes variados disponibles) más una pequeña pizca de gourmetismo.
Y esto no nos vale, como bien sabes.
¿Cuál es la solución?
Evidentemente, no es necesario disponer de algas, tahini, seitán o tofu en la nevera para alimentarse correctamente: podemos encontrar todos los nutrientes en alimentos habituales en nuestra nevera y, a partir de ahí, desarrollar platos que cumplan con nuestros requerimientos.
¿Quieres ideas?
Sea positiva o negativa la respuesta, aquí te dejo la lista de platos que utilizo en mi día a día y que cuadran con mi esquema.
*Ningún plato necesita un tiempo de elaboración alto, pero los marcados en cursiva son especialmente rápidos de hacer.
Platos únicos:
- Arroz con verduras variadas.
- Arroz con setas.
- Arroz a la cubana con plátano frito.
- Fideua con verduras variadas.
- Fideua con setas.
- Rissoto rosso (fantástica receta de Dimensión Vegana).
- Guiso de legumbres con verduras.
- Guiso de setas con patatas.
- Col rehogada con verduras y arroz cocido aderezado con salsa de soja.
- Porrusalda.
- Pasta con verduras.
- Pasta con setas.
- Pasta con ajo al aceite.
Platos combinados (combinando entre sí o como primero + segundo):
- Setas a la plancha con ajo y perejil.
- Corazones de alcachofa a la plancha.
- Brócoli a la plancha con ajo y pimienta.
- Guisantes rehogados con zanahoria.
- Judías verdes rehogadas con ajo y patata cocida.
- Tempura (rebozado con harina) de setas, hortalizas, etc.
- Calabacines al microondas con ajo, perejil y pan rallado.
- Repollo/Col cocida y luego rehogada con pimentón, aceite y vinagre.
- Coliflor cocida y aderezada con aceite, vinagre y sal.
- Patata y acelga cocida y después rehogadas con aceite y sal.
- Patatas fritas con cebolla, puerro y pimientos.
- Mazorcas de maíz cocidas y rehogadas.
- Espárragos trigueros a la plancha.
- Pimientos del padrón fritos.
- Verduras variadas a la plancha.
- Paté de champiñones.
- Paté de olivas.
- Paté de pimientos del piquillo.
- Hummus (lo venden en Mercadona hecho).
- Pisto.
- Crema de calabacín.
- Crema de calabaza.
- Crema de coliflor con guarnición de setas rehogadas.
- Sopa juliana.
- Sopa de cebolla.
- Sopa de ajo y tomate.
- Sopa de pasta.
- Sopa de pan y hierbabuena.
- Carpaccio de calabacín (facilísimo).
- Ensaladas variadas
Como ves, todo son ingredientes comunes. Incluyo en este conjunto a la salsa de soja, que está tan extendida que es facilísima de encontrar.
Y, saliéndonos de los ingredientes tradicionales, cuando alguna vez me apetece algún plato similar al histórico filete (he sido omnívoro, ergo sensible a ello) compro un paquete de seitán, que frito con abundante aceite, perejil y patatas fritas llega a superar al mítico plato al que hace referencia.
¿Necesitas algo más rápido? Echa un ojo a la sección de congelados de cualquier supermercado; suelen vender arroces con verduras y verduras a la parrilla, entre otros, listos para calentar.
Contando, por encima, la lista que te he dejado, suma algo más de 40 platos con ingredientes tradicionales al alcance de todo el mundo y en los que se integran platos de rápida elaboración. Y esto sin contar las posibilidades que da el huevo, que tú lo consumes.
Dicho esto, por favor, respóndeme a la siguiente pregunta:
De verdad,
¿es incómodo o aburrido ser vegetariano?
La única excusa válida para que lo dejes es la carestía de una ética afín a la ideología. Como ves, el resto de supuestos son fácilmente falsables.
Un saludo.