http://www.elmundo.es/economia/2014/...4108b456b.html


Los huevos vegetales de Hampton Creek en los que invierte Bill Gates


La empresa americana ha logrado crear los primeros huevos vegetarianos
«Producirlos es un 48% más barato que los tradicionales», afirma Josh Tetrick

El fundador de Hampton Creek. Josh Tetrick, de 33 años, en la sede de...


¿Qué nació antes, la gallina o el huevo? Josh Tetrick, que acaba de cumplir 33 años, está a punto de romper esa pregunta. Su empresa, Hampton Creek, creada en 2011, quiere separar el huevo de la gallina. En otras palabras: hacer huevos de plantas. Es decir, convertir a la mayor fuente de proteínas del mundo actual -los huevos-en algo vegetariano. Dicho de forma simple: utilizar plantas para los artículos alimenticios en los que se suelen emplear huevos, como tortillas, huevos revueltos o mayonesa.

La primera pregunta que a uno le viene a la cabeza cuando se entera de lo que hace Hampton Creek es: ¿Y para qué queremos huevos hechos de plantas?

La respuesta de Tetrick es la siguiente: producir una libra (453 gramos) de huevos 'de gallina' en Estados Unidos cuesta 75 centavos de dólar (unos 55 céntimos de euro), mientras que hacer la misma cantidad de huevos vegetales sale por 39 centavos de dólares, ó 28 céntimos. El ahorro se debe en gran parte al ahorro energético de estos huevos 'verdes' (en el sentido estricto de la palabra). Un huevo de gallina de toda la vida necesita 39 unidades de energía por cada unidad de energía que va a generar en el que se lo coma. Un huevo 'verde', solo dos unidades de energía. En otras palabras, el ratio convencional es de 39 a 1; el de Hampton Creek, de 2 a 1. En total, «producir estos huevos es un 48% más barato que los tradicionales», explica Tetrick.

Por de pronto, en sus casi tres años de historia, Hampton Creek solo tiene un producto: una mayonesa totalmente vegetal que se vende en la cadena de supermercados especializados en comida orgánica Whole Foods (presente en EEUU y Reino Unido) y, a partir de este mes, también en los más convencionales supermercados Safeway. Según la revista 'Forbes', la mayonesa de Hampton Creek le sale a Whole Foods un 10% más barata que la convencional. En total, las ventas de la mayonesa sin huevos de Hampton Creek ascendieron en 2013 a 11,2 millones de dólares (8,2 millones de euros).

Hasta la fecha, Hampton Creek ha atraído a un número sorprendentemente destacado de inversores que no destacan por su preocupación por las gallinas, sino por la cuenta de resultados. El más famoso es Bill Gates. El más importante, Founders Fund, el fondo de capital-riesgo de uno de los mayores donantes del Partido Republicano, Peter Thiel, que ha hecho su fortuna como fundador de PayPal y primer inversor en Facebook (y casi la ha perdido gestionando el hedge fund Clarium Capital). Otro de sus financiadores es Khosla Ventures, otro fondo que ha sido creado pro una de las 'leyendas' del capital-riesgo de Silicon Valley, Vinod Khosla. Hastab la fecha, Hampton Creek ha logrado 22 millones de euros de sus inversores.

Probablemente, el principal atractivo para los inversores de la empresa dirigida por Tetrick sea que ésta opera en un sector en el que las innovaciones tecnológicas y de gestión son muy escasas. Y, como Gates y Thiel han declarado públicamente, Hampton Creek es una compañía con un tremendo componente de investigación y una gran capacidad 'disruptora' en un sector que hasta ahora se ha beneficiado poco de los cambios tecnológicos de las últimas dos décadas.

Por eso, de las 53 personas que forman su plantilla, dos tercios trabajan en I+D. «Son una combinación de ingenieros, botánicos, expertos en alimentación y cocineros», explica un portavoz de la empresa. Hasta la fecha, lo que Hampton Creek ha hecho ha sido recorrer todo el mundo, analizar un total de 500 plantas y combinarlas para tratad de 'fabricar' el huevo vegetal. De esas 500 plantas, 11 sirven. Y con ellas es con las que están trabajando. La clave es, ante todo, la estructura proteínica de las plantas, porque el poder nutricional de un humilde huevo es absolutamente brutal. Así que 'manufacturarlo' usando plantas como materia prima es muy difícil.

Visto de cerca, Tetrick es un tipo totalmente 'cuadrado', con un aire de deportista que va más allá de cualquier duda. Y es que, aunque a sus inversores no les importe mucho, Hampton Creek tiene entre sus principios el tratamiento ético de los animales. Prácticas como la agricultura a gran escala no están, claramente, entre las cosas que agradan en esa empresa. Pero el objetivo fundamental es tener un negocio viable. Como reclalca el portavoz de Hampton Creek, «lo que hace falta es que la gente a la que no le importa el medio ambiente compre tus productos».