Porque es la única que garantiza que no se va a comerciar con la vida de los animales. La cosmética vegana, a diferencia del resto de cosméticas, no utiliza ingredientes que proceden de animales muertos, pero tampoco utiliza ingredientes como la leche, la lanolina o la cera de abejas, que no suponen la muerte del animal, pero sí la explotación económica de sus vidas. Los animales se ven obligados a producir, en condiciones de explotación, para lucrar a los que comercian y a los que fabrican productos con estas materias primas.

Algo que en ocasiones se nos olvida a la gente es que los animales de granja, son sacrificados cuando dejan de ser productivos. Aunque una gallina esté en una granja ecológica comercial, si no es productiva, se la sacrifica y se vende como carne ecológica de gallina.

Otro motivo por el que no utilizar ingredientes de origen animal para elaborar cosméticos es porque, en los tejidos grasos del animal, es dónde se acumulan las toxinas, dónde se acumula todo aquello que el organismo del animal no sabe interpretar que es. Incluso los animales de granjas dónde se practica la ganadería ecológica, acumulan en sus tejidos grasos, las toxinas que generan de manera natural en su propio organismo y las que entran en su cuerpo desde el exterior por medio de la alimentación o la respiración. La gran mayoría de los ingredientes que se usan para cosméticos y que provienen de animales vivos, tienen gran cantidad de materia grasa del animal, por tanto, si queremos hacer cosmética realmente ecológica, debemos de evitar este tipo de ingredientes.

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