De hecho algunos budistas lo que hacen es sentir ese dolor, para reenviar oleadas de compasión y remedio en muchas situaciones.
Es necesario sentir eso, pero a la vez da energía del bien.
Ponerse a sentir odio nunca soluciona nada. De hecho es el gran engaño. Y encima se echa más madera para los problemas...
Hay que hacer todo lo posible, pero hay que ayudar buscando la paz en el interior porque sino, da igual que estén vivos o muertos, una persona irradiando negatividad no beneficia en nada.