Hoy se celebra el Día de los Abuelos, promovido por Mensajeros de la Paz



Si hay algún fenómeno que la crisis ha destapado —y sin duda de forma positiva— es el gran valor que tienen los abuelos, algo que parecía olvidado en las últimas décadas. Ante las penurias económicas ellos han respondido. Su vínculo con la familia se intensifica y crece en las dificultades. Siempre están dispuestos y siempre disponibles. Para cuidar de los nietos, muchas veces a diario y por largas jornadas; para ayudar a los hijos con la hipoteca de la casa; para llenarles la despensa o el depósito de gasolina; o para echarles una mano cuando llega el seguro del coche o los gastos de libros de los niños. «La crisis ha puesto de manifiesto la cercanía de los abuelos a la familia», afirma el profesor titular de Psicología de la Universidad Abat Oliba CEU, Paulino Castells (autor del libro «Queridos abuelos», ed. Península).

Tanto es así que ocho de cada diez españoles considera que, sin la ayuda de muchos abuelos y abuelas, no podría sostenerse el actual modelo social. Son datos de una encuesta realizada por la ONG Mensajeros de la Paz, la entidad que instauró el 26 de julio como el Día de los Abuelos.

Existen otros muchos datos y detalles que demuestran que los abuelos son un gran ejemplo de solidaridad intergeneracional. Cuatro de cada diez personas mayores comparten su pensión para que la familia pueda llegar a final de mes, dice un estudio de la Unión Democrática de Pensionistas y Jubilados de España (UDP). Y nunca hay que olvidar su gran labor como cuidadores de los nietos: la mitad de los abuelos cuidan a diario de sus nietos, muchas veces por más de siete horas, toda una jornada laboral, refleja un estudio de la Fundación de Ayuda contra la Drogadición (FAD) y la Obra Social Caja Madrid.

«Los abuelos son la auténtica memoria histórica, una fuente de sabiduría y de ayuda en el terreno material y también moral. Cuando los hijos no encuentran trabajo, tienen el consuelo, el consejo y la compresión de los abuelos», señala el profesor Castells.

Vivir de la pensión

Responden en todos los frentes. «El abuelo de hoy tiene que estar al pie del cañón», defiende Francisco Muñoz, presidente de la Asociación de Abuelos y Abuelas de España (Abuespa). Y así lo hacen y lo han hecho. Muñoz lo ilustra con ejemplos que conoce de primera mano: «Hay muchos abuelos que ayudan económicamente a los hijos con las matrículas de los colegios de los nietos, la compra de libros, con una pequeña ayudita para las vacaciones o para pagar el seguro del coche o la hipoteca. También se están dando casos de abuelos que salen de las residencias porque los hijos se han quedado en paro y se los llevan a vivir con la familia. Todos viven de la pensión del abuelo. El hijo puede cuidar del  abuelo al no trabajar y el abuelo recibe más cariño».

«Nuestros hijos y la sociedad se han dado cuenta de nuestra utilidad y que nuestra función es muy importante, hasta el extremo de que no solamente el abuelo tiene que ayudar, que ya lo hacía siendo el canguro de sus nietos, sino que también se ha convertido en el banco y la despensa de la familia», afirma el presidente de la Unión Democrática de Pensionistas y Jubilados de España (UDP), Luis Martín Pindado.

Por todo eso, porque su ayuda es siempre incondicional, altruista, sin límites e inestimable, nunca está demás en un día como hoy agradecerles su gran labor. ¡Felicidades, abuelos!

http://www.abc.es/20120725/familia-p...207251528.html