A mí no me gusta el fútbol. No lo vi, no distingo un penalti de un geranio y considero que el fútbol tiene ciertos elementos, como negocio (no como deporte) que me cabrean profundamente.
Ahora bien, decir que, "tal y como está la situación", no es lícito alegrarse por los triunfos de un equipo que te gusta, si eres aficionado, es como decir que, tal y como está la situación, no te alegres por un logro tuyo profesional, porque vas a ver a tu amigo del alma al que hace diez años que no ves o por cualquier otra cosa.
El pan y el circo se lo guisa cada uno como quiere. No creo que una persona que vea fútbol y que se alegre por la selección sea imbécil y esté alienada, qué quieres que te diga. Ni creo que nadie haya estado desinformada porque ha jugado la selección. Yo es que las teorías conspiranoicas de "como hay fútbol, nos tienen comido el coco", a estas alturas de mi vida, oye, ya no me las creo mucho. Que una es muy mayor.