QUE SE LE DEDIQUE UNA ESTATUA A RUFO, “EL PERRO DE OVIEDO”
El perro callejero, que en los años 80 era como una mascota de la ciudad, sale del olvido gracias a la página de Facebook T-Oviedo



Medio mastín, medio pastor alemán vagaba a diario por los lugares más representativos de la ciudad. Lo mismo encabezaba una manifestación por Uría, posaba en la foto de investidura del presidente regional, se daba un garbeo por el Campo de San Francisco o asistía a los partidos del Real Oviedo en el antiguo Carlos Tartiere. Y cuentan que también era bastante nocturno, siempre en la zona de copas, incluso tenía su esquina en algún que otro bar.

Era un perro vagabundo, pero con dueño. Su dueño era la ciudad de Oviedo. Si, aunque resulte contradictorio, Rufo vivía en la calle amparado, protegido y alimentado por todos los ovetenses. Era de todos y no era de nadie. Cariño y comida nunca le faltaron. Sabía muy bien como resguardarse del frio en invierno en los portales calientes de la ciudad.

El Ayuntamiento se encargaba de vacunarle, desparasitarle y darle un buen baño. Cuando se terminaba de “acicalar” era puesto nuevamente en libertad.

El Fontán, la Escandalera, el parque de San Francisco, la Plaza de la Catedral… era el hogar de Rufo, donde vivió casi siempre en libertad. Digo casi siempre porque en una ocasión, Rufo fue capturado y llevado a la perrera municipal. Fue tal el revuelo y el enfado de los ovetenses por su captura, que incluso se realizó una manifestación por las calles de la ciudad para exigir su puesta en libertad.

Todo eso se recuerda de Rufo, el perro que durante los años 80 formó parte del paisaje de la ciudad y que ahora protagoniza una recogida de firmas que ya ha alcanzado los 5.000 apoyos. El objetivo: que Rufo tenga una estatua en la ciudad.



La iniciativa nació desde la página de Facebook T-Oviedo, un espacio donde de modo altruista sus gestores cuelgan fotos antiguas de la ciudad. Buscan aquí y allá, y muestran el aspecto que tenía la ciudad antaño. Cuentan con la ayuda de sus casi 10.000 seguidores que en cuanto vieron la imagen de Rufo se pusieron a compartirla. Más de 600 personas la colgaron en sus muros. El administrador de T-Oviedo, Tei, acompañaba la imagen del perro callejero, protegido y alimentado por los ovetenses, con un texto que terminaba diciendo «¡Una estatua para Rufo ya!». Dicho y hecho. Los seguidores comenzaron a apoyar la petición que llegó a la plataforma change.org. Ha firmado gente de más de 30 países diferentes, desde Japón a Venezuela. Con estos apoyos, los administradores se dirigirán al Ayuntamiento. Será entonces cuando se debata sobre la forma de financiación que podría ser popular o un encargo a artistas.

Hoy día, somos muchos los que echamos de menos aquellos tiempos en los que Rufo nos hacia felices con su simple presencia y del que todos nos sentíamos orgullosos. Es por lo que pedimos al excelentísimo Ayuntamiento de Oviedo, mediante unarecogida de firmas, que todas estas historias y anécdotas no caigan en el olvido. Que sea recordado como el fiel compañero de todos los ovetenses, que sigue perdurando en nuestros corazones y pensamientos, demostrando que fuimos y somos un ejemplo de sociedad civilizada donde los animales forman una parte muy importante de ella.

Es por esto que pedimos vuestra ayuda y vuestra firma, para que Rufo sea recordado siempre como lo que fue y lo que es para todos nosotros, nuestro fiel amigo, el perro de Oviedo. Podéis firmar la petición

https://www.change.org/es/peticiones...erro-de-oviedo

. Gracias de corazón.

http://blog.pacma.es/2014/rufo-el-perro-de-oviedo/



http://www.guerrillerosglobales.com/...rro-de-oviedo/