CitarTengo que reconocer que me obsesiona un poco el tema...me da miedo de que mi hija no tenga amiguitos en el cole...
La tímidez no es la única causa que impide a los pequeños relacionarse. Es fundamental detectar los motivos para tratar el problema
padres y docentes deben coordinar su actuación para integrar a los pequeños
Para cualquier padre supone una gran inquietud observar cómo su hijo tiene dificultades para relacionarse, no juega con otros niños, se siente incómodo con ellos y, finalmente, se aísla. Les angustia no tanto lo que sucede, sino desconocer la causa. Necesitan saber la razón por la que su hijo reacciona así para poder tomar medidas y aplicar soluciones. ¿Se trata de timidez o hay algún problema más?
Sergi Banús, psicólogo infantil y director del gabinete Psicodiagnosis, explica que el niño tímido viene marcado genéticamente y «es aquel que tiene facilidad para desarrollar miedos, fobias... y entiende las relaciones sociales, pero le superan por su inseguridad. Juega solo o en grupos de dos o tres niños también tímidos».
La timidez no es una enfermedad, sino una característica de nuestra personalidad. «Ya en la guardería se puede observar a niños que prefieren estar solos -apunta Ángel Villaseñor, psicólogo y coordinador del Hospital de Día de Trastornos de la edad escolar del Hospital Niño Jesús- a los que conviene observar para ver su evolución, pero sin perder de vista el entorno familiar en el que viven y que puede ser el desencadenante».
Puede ocurrir que no se trate de timidez, sino de tristeza. «Sería el caso de aquellos niños que antes jugaban pero a los que, alguna circunstancia -sufrir un accidente, la pérdida de un familiar, la separación de los padres, el nacimiento de un hermano...- les hace estar apáticos, tristes y no relacionarse adecuadamente», explica Sergi Banús.
También existen otros factores externos al niño que pueden marcar el tipo de relaciones sociales en el colegio. Por un lado, su nivel cultural e inteligencia, porque los más listos tienden al liderazgo y a rodearse de otros niños, mientras que los menos listos o con con algún tipo de discapacidad son susceptibles de quedarse al margen e, incluso, de ser objeto de burla. «La procedencia también es importante, puesto que en muchos colegios se juntan niños chinos, españoles, ucranianos... y cada cultura lleva su código y estilo de relación social y educativo», añade Villaseñor.
Casos clínicos
«Es importante que, en cualquiera de los casos expuestos, los padres estén atentos al comportamiento de su hijo para poder ayudarle en consecuencia. Normalmente, estos niños no sacan buenas notas y se tiende a pensar que es porque no están atentos, son vagos... lo que lleva en muchas ocasiones a reprimendas y castigos. Actuando así no se soluciona el problema, se agrava, porque las malas calificaciones son una consecuencia y no la causa».
Existen otros motivos que afectan a las relaciones sociales en la infancia. Esta vez son clínicos. Es el caso de los niños TDAH, con trastorno por déficit de atención con hiperactividad. Estos niños primero actúan y luego piensan, por lo que pueden dar un tortazo a otro amigo y luego darse cuenta de que está mal, de manera que las relaciones sociales se deterioran bastante porque son apartados sistemáticamente. «Son niños buenos -aclara Sergi Banús-, pero con dificultades por su impulsividad. Sufren mucho porque quieren relacionarse, pero se encuentran con muchos problemas para ello».
Otro caso clínico es el de los niños deprimidos. La tristeza es tan elevada que les incapacita para llevar su vida normal. «Hasta hace poco era negada la depresión en la infancia, pero hay pequeños que sufren de ansiedad y desarrollan fobias, como la escolar, lo que les impide estar con otros pequeños», apunta Banús.
Un colectivo que desarrolla grandes dificultades para relacionarse es el de los niños con algún tipo de trastorno de vinculación, es decir, niños adoptados, maltratados o que están o han pasado por centros de acogida. En estos casos, sus emociones están alteradas, pasan con facilidad del llanto a la risa y son grandes agresores emocionales. En el entorno escolar pueden defender a un niño y a los pocos minutos meterse con él. Conductas como estas son las que hacen que sean apartados de los demás.
Mención especial también merecen los niños TEA (trastorno del espectro autista), que conservan todas sus capacidades cognitivas y saben leer, hablar.... pero les falla la inteligencia emocional. Entienden las palabras, pero no el código paralingüístico; es decir, no interpretan el mensaje, no saben si una frase supone una broma o un insulto. «Además, dicen lo que piensan, sin atender a convencionalismos sociales, y pasan por maleducados y nadie quiere estar a su lado. Ellos sufren mucho porque no entienden por qué otros niños no se relacionan con ellos. En cada escuela española hay entre uno y dos casos de niños con este problema», concluye Banús.
Lo que hay que hacer
En el caso del niño tímido, antes de acudir al especialista «conviene favorecerlas relaciones con los demás de manera natural: en el parque con otros niños, llevándole a cumpleaños, dejando que se quede en el patio del colegio jugando, apuntándole a actividades extraescolares...», señala Alfonso Ladrón, psicólogo
clínico del Hospital Clínico San Carlos. Cuando se trata de tristeza aparecen alteraciones emocionales. «Si los padres conocen bien al niño sabrán detectar si no se relaciona porque está triste o nervioso, y tendrán que hablar con él o investigar preguntando por si en el colegio ha ocurrido algo. Conociendo la causa, se podrá actuar para calmarle y evitar su tristeza».
Alfonso Ladrón es de los que transmiten el mensaje de que cada persona es diferente, «y los niños TDAH lo son», puntualiza. Recomienda que, en estos casos, se informe a los niños de la clase sobre en qué consiste su actitud -del mismo modo que lo harían los profesores si hubiera un niño ciego- para que no malinterpreten sus actos. Para lograr su integración también deben saber que los juegos como el escondite o de mesa que requieren concentración y esperar que llegue el turno no son recomendados para ellos, puesto que no tienen paciencia. «Cuando se trata de niños TEA es siempre imprescindible la intervención de un profesional médico ?puntualiza Ladrón?. Dependiendo del grado de gravedad, determinará que los padres actúen de una manera u otra». Para Ángel Villaseñor, psicólogo y coordinador del Hospital de Día de Trastornos de la edad escolar del Hospital Niño Jesús, siempre que hay dificultades en las relaciones sociales «el ámbito clínico resulta esencial, puesto que el niño siempre sufre y hay que evitarlo. Los profesionales serán los encargados de tratar al pequeño de manera individual y, en ocasiones, también a sus padres para trabajar los vínculos de aprendizaje, analizar si el estilo parental es sobreprotector o son niños de padres incompetentes que fomentan la inseguridad y la dificultad en las relacciones sociales dentro del ambiente familiar». Ángel Villaseñor recomienda que los padres hagan reflexiones con sus hijos y les fomenten actitudes siempre positivas.
http://www.abc.es/20120330/familia-p...203301556.html
Vive y deja vivir.
Tengo que reconocer que me obsesiona un poco el tema...me da miedo de que mi hija no tenga amiguitos en el cole...
A mí me parece un tema horroroso, la verdad.
Tengo una amiga que ha tenido depresiones constantes porque resulta que es Asperger, no tenía amigos nunca y nadie lo vio. La diagnosticaron con 30 años. ¿El problema? Que también es superdotada y las niñas superdotadas (y las niñas más inteligentes) están acostumbradas a "disimular su inteligencia" para pasar desapercibidas. ¿A que es aterrador? (Luego vendrá un macho y dirá que las cosas han cambiado mucho y que bla bla bla).
Daniela no va al cole todavía, no me seas anticipadora, tú. Yo estoy dividida en este tema. Para empezar, me revienta los higadillos que se vea a la timidez como un "defecto de la personalidad" y que el niño tenga que ser sociable y abierto por decreto. Pero sé que también es cierto que una persona tímida parece apocada (y a lo mejor no lo es) y que puede ser más propensa no solo a no tener amigos sino a sufrir acoso escolar. En mayor o menor medida. Que yo también tengo un concepto muy claro de lo que es acoso escolar y de lo que no lo es.
No ser tímido tampoco va a salvarlo de que lo insulten. Puedes ser la persona más desenvuelta del mundo y que te insulten igualmente en en recreo...
Bueno, ser tímido no significa necesariamente tener problemas reales para relacionarte. A lo mejor, como dice ahí, con tus cuatro amigos también tímidos eres de lo más feliz, aunque te cueste entablar conversaciones con deconocidos o cosas así. (se nota que sé de lo que hablo xD)
Yo creo que el problema de aislarse normalmente sí que viene por algo que ha pasado, situaciones familiares etc... En general, pienso que un niño que crece con amor y sabiendose protegido por sus padres no va a tener estos problemas, al menos no de forma grave o permanente. No sé, es una teoría.Basada en mi observación y desde mi perspectiva de persona tímida. yo tuve momentos en el cole en que me aislaba, me iba sola a una esquina y no quería jugar con nadie porque pensaba que nadie quería jugar conmigo. En cuando unas cuantas amigas empezaron a hacerme casio ya fui otra persona. Entre ellas me sentía aceptaba y con ellas no era nada tímida, de hecho me tenían por divertida y graciosa. Así que nunca se sabe de donde vienen esas actitudes, pero en mi caso fue algo puntual y nada grave, solo debido a mi personalidad de por si introvertida. COn apoyo de mis padres, que de aquella no se enteraban ni de lo que me pasaba en el cole, probablemente ni habría pasado. Pero las relaciones con los padres de antes eran muy distintas, no había la comunicación necesaria.
Así que en el caso de Daniela ni me preocuparía porque esa falta de comunicación no se va a dar y antes de que pase algo así, tú sabrás cómo se siente.
También tenía una amiga cuyo padre -cabrón que por suerte murió de cáncer y espero que haya sufrido mucho-le pegaba, a la que le pasaba eso que explican arriba, pasaba del amor al odio en medio minuto. Hoy era tu mejor amiga, venía a tu casa con regalos... y mañana te hacía la vida literalmente imposible. Siempre supe que era por sus traumas, así que aparte de que como humana con sentimientos que soy a veces me proponía no volver a hablarle jamás, en general me daba pena y era comprensiva, pero llegó un punto que era insostenible y perdimos la relación. Espero sinceramente que esté mucho mejor, porque es muy triste ofrecer a alguien que lo necesita tu amistad sincera y que te pague jodiendote la vida, y al final, pierde a sus amistades y "con razón".
Daniela no va a tener ningun problema, ya lo veras. No hay mas que verla ahora, de bebe. Tu ninha se va a comer el mundo como ahora se come los platanosIniciado por vellocinodeoro
(y no te lo digo por tranquilizarte, eh? es que veo sus fotos y me recuerda a mi sobrina, que se lleva todo por delante, tan diferente de su hermano que ya, in utero, era distinto a ella
Y estoy totalmente de acuerdo con Paulveg. Ser timido no es sin'onimo de que seas infeliz. Ademas, la timidez es dificil de definir. no todos los timidos son esos ninhos en una esquinita, apsando desapercibidos, etc.
We do not inherit the Earth from our ancestors: we borrow it from our children.
El optimismo de la acción es preferible al pesimismo del pensamiento. Proverbio Cree.
Yo lo que quiero (y no sé si lo haré bien, pero esa es mi intención) es fomentarle mucho la seguridad en sí misma. Sea tímida o no lo sea, creo que siendo una persona segura de ti misma, tienes mucho ganado.
Gracias, guapa. Basándome en mi experiencia personal también intentaré por todos los medios darle importancia a las cosas a las que ella se las dé y tomarme sus cosas muy en serio y nunca pensar "son cosas de niños".Bueno, ser tímido no significa necesariamente tener problemas reales para relacionarte. A lo mejor, como dice ahí, con tus cuatro amigos también tímidos eres de lo más feliz, aunque te cueste entablar conversaciones con deconocidos o cosas así. (se nota que sé de lo que hablo xD)
Yo creo que el problema de aislarse normalmente sí que viene por algo que ha pasado, situaciones familiares etc... En general, pienso que un niño que crece con amor y sabiendose protegido por sus padres no va a tener estos problemas, al menos no de forma grave o permanente. No sé, es una teoría.
Así que en el caso de Daniela ni me preocuparía porque esa falta de comunicación no se va a dar y antes de que pase algo así, tú sabrás cómo se siente.
Daniela no va a tener ningun problema, ya lo veras. No hay mas que verla ahora, de bebe. Tu ninha se va a comer el mundo como ahora se come los platanos
Y estoy totalmente de acuerdo con Paulveg. Ser timido no es sin'onimo de que seas infeliz. Ademas, la timidez es dificil de definir. no todos los timidos son esos ninhos en una esquinita, apsando desapercibidos, etc.
Supongo que todas sabéis lo que me da miedo: que un día venga diciéndome que se ríen de ella porque no come bocatas de chorizo :eing:
No sé cómo se fomenta la seguridad en uno mismo. Te pueden pasar muchas cosas y no todas dependen de tus padres. Muchas dependen de lo hijodeputas que sean tus compañeros de colegio...
Tampoco sabes si va a comer o no bocatas de chorizo...
Yo tampoco lo sé. Lo que sí sé es cómo no se fomenta, al menos eso lo tengo claro.No sé cómo se fomenta la seguridad en uno mismo. Te pueden pasar muchas cosas y no todas dependen de tus padres. Muchas dependen de lo hijodeputas que sean tus compañeros de colegio...
Tampoco sabes si va a comer o no bocatas de chorizo...
Y sobre los bocatas de chorizo, también tengo claro que cuando mi niña vaya al cole no le haré bocatas de cosas absurdas para un niño (imagínate un niño con un bocata de tofu, el hazmerreír fijo). Pero sí le puedo hacer bocatas de cosas ricas sin ingredientes de origen animal como tortilla, nutella y cosas así...y otra cosa que tengo clara es que puede que mi hija pruebe el chorizo en el patio del colegio y le guste. Si eso sucede, ya veré lo que hago, pero vamos, que igual que mis sobrinos no serían capaces de comerse un filete de perro o de gato porque se les revolvería el estómago, confío en que a mi hija se le revuelva también el estómago con la sola idea de comer al resto de los animales.
Yo creo que se le pueden hacer muuuuuchos tipos de bocatas... Yo siempre pienso en patés vegetales, un bocata de hummus con tomate y lechuga no suena raro, porque es paté. Y otros patés tampoco. Un bocata de tortilla de patatas con pimientos también.
De todos modos, yo creo que lo de la comida, como son "tabúes" sí que se puede controlar más. Lo ideal sería que ella "creyera y supiera" que es elección propia, porque ya sabemos todos qué pasa en la adolescencia con las imposiciones de los padres...
Como tenga una adolescencia la mitad de mala que la mía, miedo me da...
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