Estoy con Davichin, yo creo que el hombre quería lo que tu estabas dejando pero no se atrevía a decírtelo, es como cuando un perro te mira fijamente cuando estás comiendo algo que le gusta, no te lo puede pedir porque no habla pero con la mirada lo dice todo, eh aquí el dato que dice que nos parecemos más de lo que pensamos a los animales, jeje