Podría haberlo titulado: "Un día de furia, versión vegana".
Seguro que horas antes estuvo en un atasco en la M-40 y se le caló el coche, salió de allí y se fue a un establecimiento donde pidió un sandwich vegetal y descubrió que llevaba atún, entonces se fue hacia el mostrador y le dijo a la dependienta que el atún no crece en los árboles, cundió el pánico más aún cuando alguien de la mesa contígua empezó a quejarse de los vegetarianos y sus carencias, entonces sacó el suplemento de B12, DHA y vitamina D y en un impulso reprimido le hizo memorizar las cantidades diarias recomendadas de los tres mientras escribía este texto para las redes sociales. To be continue...