Encontré este artículo no recuerdo donde y me pareción interesante. ¿Hay alguien que tenga experiencia en este tipo de alimentación? Creo que actualmente sólo es posible en un clima adecuado y quizás nuestra evolución adaptativa a diferentes medios nos haya hecho dependientes de otros alimentos. Si bien el vegetariano estricto sólo parece necesitar de suplementos de B-12 (parece ser que desde el momento que abandonamos nuestra relación con la tierra donde se encuentran las bacterias que la producen); el crudivorismo y su más alta expresión que es el frugivorismo por ser poco comunes, vienen acompañadas de una gran desinformación como para atreverse con ellas (o al menos a mí me lo parece). ¿Alguien que arroje un poco de luz con su experiencia?
Frugivorismo: propiedades y características de las frutas
Frugivorismo
La constitución anatómica y fisiológica del hombre es la correspondiente a un ser del tipo FRUGÍVORO. El hombre sólo debería comer aquello que contenga gérmenes de vida como corresponde a su naturaleza superior, por lo tanto la alimentación ideal del hombre perfecto es la de frutos crudos.
Aparte de ser los frutos aquellos alimentos que, bajo el punto de vista fisiológico, armonizan con su organismo de una manera perfecta, son también los que, extremando las propias exigencias, permiten realizar un ideal constructivo y de inofensividad, ya que para procurárnoslos no necesitamos privar de la vida a ningún animal ni vegetal.
Es la alimentación que no exige destruir. El árbol o la planta nos brinda sus frutos, verdaderos acumuladores de la energía solar, sin que para ello tengamos que cortar su vida que también nos da sombra, frescura y deleite.
Hasta la misma semilla es arrojada íntegra a la tierra o eliminada en las deposiciones con el más eficaz de los abonos.
Mas, el hombre no sólo debe comer frutos, sino que los debe comer crudos para aprovechar íntegramente su valor nutritivo y sus factores de vitalización que, como hemos de ver, sufren importante merma bajo la acción del fuego.
La alimentación de frutas, por las condiciones fisiológicas de su ingestión, va unida a una sobriedad natural que no exige esfuerzos de contención. Además es completa porque contiene albúminas suficientes (nueces, almendras, etc.), hidrocarbonados ( féculas y azúcares) en gran cantidad (bananas, uvas, manzanas, peras, almendras, etc.), grasas en abundancia (nueces, aceitunas, almendras, cocos, etc.), siendo, como sabemos la fuente más importante de provisión de vitaminas y sales minerales vitalizadas.
El frugivorismo es la más alta expresión del vegetarianismo, es el único sistema de alimentación que no ofrece contradicciones desde los diferentes puntos de vista, que en general se tienen en cuenta al abordar una alimentación más sana, por ejemplo: ético, moral, religioso, ecológico, medicinal, o nutricional.
Es en los frutos, donde el árbol o la planta acumula la mayor cantidad y calidad de energía, pues en las semillas se encuentra toda la información genética para el desarrollo de una nueva vida, para la conservación de su especie, de los frutos saldrán los nuevos hijos, la descendencia; y generalmente cubriendo esa semilla (o reservorio genético) hay una pulpa que protege esa valiosa semilla, esa pulpa esta colmada y desbordante de energía solar en su más sublime versión, protegiendo la vida y promoviéndola, por eso al ingerir este tipo de alimento se está aprovechando al máximo la energía solar, que es, en definitiva lo que directa o indirectamente el ser humano toma de los diferentes alimentos para nutrirse.
Lo más recomendable es siempre alimentarse con los frutos naturales del lugar donde se vive, y justo en el momento que el árbol o la planta los deja caer al suelo, ese es el momento óptimo.
No existe en la naturaleza nada que supere en calidad alimenticia a las frutas.
Propiedades y características de las frutas
ACEITUNAS:
Son los frutos del Olivo (Olea europaea, de la familia de las Oleáceas). Contienen: 0,7 % de albúmina, 8,5 % de hidratos de carbono, 14 % de grasas y 0,4 % de sales minerales (potasio, calcio y sodio). Son como se puede observar un gran alimento productor de fuerza y de calor, muy recomendables en invierno, también ayudan a la disolución de los depósitos calcáreos que pueda haber en los tejidos del organismo y que son señal de envejecimiento. Estimulan los jugos digestivos y son de fácil digestión cuando se mastican correctamente. Las aceitunas negras (o sea maduras) también contienen vitaminas A y C.
ALMENDRAS:
Son los frutos del almendro (Amigdalus communis). Contienen: 21% de albuminoides, 53 % de grasas, 17 % de hidratos de carbono, y 3 % de minerales. Deben masticarse lo máximo posible para que cumplan todo su papel nutritivo. Son, de los más potentes alimentos de la naturaleza, muy generadores de calor por la gran cantidad de grasas que contienen, y generadores de energía muscular por su riqueza en hidratos de carbono. Llevan gran proporción de sales entre las que domina el fósforo, lo que las hace muy útiles para los que realizan un gran trabajo intelectual y para los enfermos del sistema nervioso, también contiene potasio, magnesio, calcio y vitaminas B1 y B2. La proteína de la almendra es de las más completas, pues posee la mayoría de los aminoácidos necesarios para la vida.
ANANÁ o PIÑA:
Es el fruto del Ananassa sativa (de la familia de las Bromeliáceas). Contiene un 13 % de hidratos de carbono o azúcares, lo que lo hace uno de los frutos más alimenticios. Resulta muy digestiva, refrescante, depuradora, laxante y mineralizadora. También contiene ácido málico, cítrico y en menor proporción yodo, hierro, cobre, manganeso y es rica en vitaminas A, B1 y B2. Es muy recomendable para los enfermos que padecen dispepsia, y para las enfermedades de la boca, faringe y laringe. Exteriormente sus rodajas aplicadas en cataplasma sobre la parte afectada, son muy útiles en mordeduras de perros, picaduras de víboras e insectos. Su época de cosecha es el verano, por lo tanto es esta, la mejor época para consumirlo.
AVELLANAS:
Son los frutos del Corillus avellana (de la familia de la Cupulíferas). Contienen 17 % de albúminas, 60 % de grasas, 15 % de hidratos de carbono, sales minerales (potasio, fósforo y calcio) y vitaminas B1, B2 y C. Se deben masticar muy bien, para que su digestión no sea difícil.
Son un gran alimento de formación de tejidos (por sus albúminas), de fuerza (por sus azúcares), generador de calor (por su grasa) y mineralizador (por sus sales), o sea un alimento completo, un verdadero tesoro alimenticio.
BANANAS:
Son los frutos del Musa paradisíaca y M. Sapientum (de la familia de las Musacéas). Contienen 23 % de hidratos de carbono, 1.40 % de albúminas, sales minerales (potasio, sodio, fósforo y calcio) y vitaminas B6 y E. Su valor nutritivo es superior al de la mayor parte de las frutas frescas.
Debe consumirse bien madura, pues así, todo el almidón se ha convertido en azúcar, tan asimilable como el de las naranjas, pero más abundante que el de éstas. Contrariamente a lo que se cree, esta es una fruta de fácil digestión, indicada especialmente en la acidez y úlcera de estómago, como también en ciertas afecciones del corazón y riñones, en las cuales es indispensable una cura seca. Facilitan y fluidifican las secreciones del organismo, sobre todo los jugos digestivos.
Su pulpa, blanda y sabrosa, es un excelente alimento para niños y viejos, ya que tiene un gran poder antirraquítico, y en algunas regiones donde se cultiva, se consume en lugar de pan. Con su cáscara se hacen cataplasmas muy beneficiosas para casos de torceduras o magulladuras con tendencia a inflamarse.
CALABAZA o ZAPALLO:
Es el fruto de la Cucúrbita pepo (de la familia de las Cucurbitáceas). Originario de América del sur, ofrece muchas variedades, todas muy nutritivas y de sabor agradable. Contiene sales minerales (fósforo y calcio), y vitaminas A, B1, B2, B6 y C. Es muy digestible y contribuye al buen funcionamiento del intestino. Sus semillas crudas son vermífugas (combaten la tenia y otros parásitos intestinales).
CASTAÑAS:
Son los frutos del Castaño (Castanea vesca, Willde, de la familia de las Cupulíferas). Las frescas contienen 3 % de albúminas, 1 % de grasas, 35 % de hidratos de carbono, sales minerales (gran cantidad entre las que sobresalen el potasio y el fósforo), celulosa y un 58 % de agua, en cambio secas contienen un 7 % albúminas, 3 % de grasas y 85 % de hidratos de carbono. Son muy estimulantes de los movimientos de expulsión del intestino.
Son de un valor nutritivo comparable al de las almendras, y como estas deben ser bien masticadas.
CEREZAS:
Son los frutos del Cerezo (Cerasus juliana, de la familia de las Amigdaláceas en diferentes variedades). Contiene 0,6 % de albúminas, 15 % de almidones y azúcares, 0,5 % de sales minerales (potasio, sodio, fósforo, calcio, magnesio y hierro), y vitaminas A, B1 , B2 , C, y se consiguen frescas en noviembre y diciembre. Estas deliciosas frutas son altamente depuradoras de los humores, desinfectan el intestino y mineralizan la sangre.
Muy recomendables en enfermos uricémicos, artríticos y gotosos, ya que son gran neutralizantes del ácido úrico, por contener ácido salicílico y químico. Es la fruta que contiene mayor dosis de vitamina C con excepción de la guayaba. Muy aconsejable para el crecimiento en los niños, debido a su contenido de sustancias minerales.