Vaya vaya!, últimamente estaba empezando a molestarme el hecho de estar siempre respondiendo preguntas a mi juicio tontas ( como: ¿y qué comes?)y "justificando" mi opción. Pensandolo bien, es una buena idea el ir explicando tus motivos, ya que quizás ello ayude a que el pregunton reflexione. La parte menos graciosa viene cuando, sin respeto, quieren, por el propio sentimiento de culpa, que les des la razón. De hecho hace bien poquito me fui a una de esas comidas navideñas, fué increible!, me sentí verdaderamente incómoda;
- hay arroz a la sepia, con unas excelentes gambitas, y si no te apetece tenemos carne o pescado-dijo el metre
- no me apetece lo que me ofreces, me gustaría ver que teneis como opción vegetariana?-quería probar el no tener que identificarme como "VEGETARIANA", simplemente quería esa opción. Ëste cambió de color, -tenemos un pescadito buenísimo y hay bistec, salomillo, costillas....,caracoles también!-, tras repetirse el mismo diálogo unas tres veces, y varios ataques por parte de mi familia (venga, Sabina, por un día!, que más da un trocito de carne!), decidí quedarme con los entrantes vegetarianos y una tortillita francesa. Lo que sí me parece vergonzoso es que un restaurante tenga tantos cubiertos y tanto diseño y tengan tan poco en cuenta las diferentes opciones alimentarias!.
Al final parece que quieras ir a contra corriente!. Y si no quiero ir por donde la corriente me lleva, qué?!!!