Qué horrible, y qué triste! Cuesta creer que sea cierto. Era solo una niña, una niña pequeña. Y sus padres, dónde estaban todo ese tiempo?
Lo peor que es que estamos tan indefensos como esa niña ante la invasión china. En mi ciudad, cada comercio que cierra -de los de toda la vida- es sustituido a los 2 días por una tienda de chinos: ropa, multiprecios, tienda de todo un poco, taller de confección (24h al día), etc.
En la mayoría, los niños y niñas están junto a sus padres todo el día dentro de los comercios, incluso atendiendo por corta edad que tengan.
Tengo la sensación de que nos miran diciendo: "os vais a enterar.... a la velocidad que os comemos terreno muy pronto vais a venir vosotros a pedirnos trabajo"