Esta pequeñez es Maya, y esta es su historia:
Nos encontramos por la calle a un niño jugando a dar golpecitos a algo a través de un agujero en un muro de una casa abandonada y tapiada. Me pareció sospechoso, y me acerqué: "¿Qué haces?" "¿Es que dentro hay un gatito recién nacido". "¿Cómooo???"... No era recién nacido pero sí era una gatita bebé, de no más de mes y medio, metida en ese sucio agujero, sola, entre escombros, maderas rotas y basura y gritando sin cesar. "Pero... ¿tú sabes cómo ha llegado aquí, dónde están su mamá y hermanos?"- pregunto. El chaval nos confiesa que se la encontraron en la calle, sola, en pleno Orcasitas (nada cerca de donde estábamos) y que la cogieron y se la llevaron a su casa y que su madre, al ver la gata, dijo que ni hablar de gatos en casa así que el niño, la dejó en ese agujero donde les vimos.
Una vez más, actúa la ignorancia de la gente y por supuesto su enorme y absoluta ausencia de compasión. Allí esta pequeñez era imposible que sobreviviese. La cogimos. Estaba literalmente plagada de pulgas. Se las veía a montones, perfectamente, correr entre su piel, alrededor de los ojos, por las orejas, la tripa... Estaba llena de puntitos negros, los excrementos de las pulgas, que manchaban de negro todo su blanco pelo.
Ahora se llama Maya.
Maya busca adopción. Ha estado sometiéndose a un tratamiento intensivo de desparasitación. Maya ahora está limpísima y no tiene ni una sola pulga en su blando y suave cuerpecito. Los enormes parásitos internos que tenía ya no están y Maya espera a sus primeras vacunas para esta semana.
Ahora debe tener poco más de un par de meses. Ha resultado ser una bebé activísima, llenísima de energía, más que juguetona, graciosa y muy inteligente y espabilada.
La verdad es que mirarla un rato jugar, garantiza unas buenas carcajadas
¿Quieres ser tú quien te lleves esta delicia a casa? Maya busca papis que cuiden de ella muy, muy bien y que quieran en casa ¡un pequeño torbellino blanco!
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(al niño no)jejeje
