A ver si tienes un momentito y nos cuentas de tus dos pequeñas, que se os echa mucho de menos
Pues yo vengo a contar que tengo un ratón en casa de doce años. Sale a picotear por las noches cuando nos acostamos. Tengo a en la cocina y a la vista frutas frescas, deshidratadas y frutos secos pero ni los toca. Busca galletas.
Es un ratón grandote que siempre ha estado en el percentil 75 de peso y altura y vigilando ofreciendo verduras y frutas y opciones saludables para que el peso no se disparara porque es un ratón que adora los dulces. Sin embargo siempre ha estado más o menos proporcionado. Nunca ni gordo ni delgado pero con unas pautas alimenticias para conseguirlo.
Temo que estas excursiones den al traste con todos los intentos de equilibrar la dieta.
Como vi en navidad que el apetito del ratón aumentaba, le propuse un deporte extraescolar y decidió ir a kárate y lleva un par de semanas encantado.
Imagino que no es de preocupar. Que es por el estirón, pero esta mañana, al ver rastros del festín de anoche, me he puesto a mirar las características fisiológicas de la adolescencia y he sacado como conclusión que es temprano para el apetito voraz por estirón en varones, quizás.
Explica que en niñas se manifiesta de forma más temprana, pero en niños hacia los 14 coincidiendo con los cambios físicos. Mi ratón sigue tan inberbe y lampiño como un niño y no le veo aun signos de estar dando el cambio.
Lo de la alimentación para mí es un tema delicado porque sí que hablamos de ello pero como fuente de salud y de bienestar, no como algo que pueda perjudicarle y no sé cómo manejar el asunto. Por un lado pienso que no hay motivo para la preocupación porque se podría deber a algo físico y él mismo acabará regulando su apetito, pero por otro tengo el temor a que si no hago algo, pueda tener problemas de peso en el futuro pues tengo entendido que a estas edades es clave mantenerse en un peso saludable.