Gaia lo está llevando bastante bien, lo único raro que le he notado estos días son esos cambiazos de humor. También está demandando mucha teta, supongo que le consuelo. Espero que siga así de bien, el cuelete bien y por las noches sigue igual de tranquila.
Por cierto chicas, hoy le he escrito a Gaia una carta, precisamente la tenía dormidita encima y me ha entrado la inspiración. Me apetece compartirla con vosotras, espero que no os parezca muy cursi.
Carta a mi hija Gaia
Nací mujer. Crecí mujer. Pasé veintiséis años de mi vida siendo mujer, pero sólo al llegar tú me convertí en hembra. Hembra, como la luna. Me asemejaste a ella, a la reina del cielo, vistiéndome con sus cuatro fases, pues también yo fui creciente, llena, menguante, y finalmente nueva, una persona nueva. Cíclica, como la luna.
Por ti he rodado sobre el barro de mi lado más salvaje, y toda mi piel la he manchado de ternura, pues hurgando entre jirones de prejuicios me trajiste de regalo mis instintos más primarios. De tu ombligo ha pendido mi feminidad, y por ti he sido mansa y fiera, clara y oscura. Mamífera que gesta, que pare y amamanta.
Por ti he sido los cuatro elementos: tierra fértil que germinó tu semilla, agua dulce que fue tu hogar, fuego lento que te forjó y aire cálido que alimentó tu llama.
He sido la hermosa Afrodita, la virgen Hestia, fértil como Hera y dura como Atenea. Humana y diosa, humilde y grande.
Y todo por ti, gracias a ti.
Por ti emoción en puro estado, un animal, la sinrazón más atrevida. Por ti una flor que albergó un tesoro, que abrió sus blancos pétalos, untándolos de rojo en el día de su parto. Por ti he amado el perfume de mi sangre.
Tú has borrado de mi espejo los fantasmas, y nunca antes los círculos fueron tan bellos: los círculos de mis pechos, mis pezones y areolas. Círculo de mi vientre preñado, y círculos de mis óvulos en mis redondos ovarios. Como la luna, pues, círculos mágicos.
Por ti mis tímidos senos han servido de algo porque ahora son sustento: agua y alimento. Por ti he crecido tanto que casi he tocado el cielo, mas para estar a tu lado, te amaré a ras de suelo.
Por ti abandoné la crisálida desplegando al fin dos grandes alas que sólo tú has salpicado de colores. Por ti he encontrado raíces enredadas a los dedos de mis pies, y he caminado sobre ellas para redescubrir el origen de mi alma: y es que sólo a la Gran Madre están ligadas.
Por ti, gracias a ti, hija mía, soy.
Y por eso te pido que seas feliz, que ames la vida y que pases por ella haciendo todo el bien que puedas, y el menor mal posible. Que crezcas no sólo por fuera, que luches y aprendas, que goces y escuches. Que por siempre fluyas y jamás permanezcas. Panta rei, Gaia. Panta rei.
Iniciado por maestra Gaia
por compartirlo. es una belleza...
"La alimentación vegetal no solo embellecerá y fortalecerá tu cuerpo sino que lo hará también con tu alma." Bernardine.
Qué bonitoooo...
Gracias, señora editoraIniciado por Walkiria:
Qué bonitoooo...En serio, me alegro de que os guste
Qué bonito Maestra
Ay, qué emocionante...conmovedor, precioso de verdad
Eh! Vellocino: ¿ya fue el cumple de Daniela? O se me ha colado la info del festejo o no ha sido...
"La alimentación vegetal no solo embellecerá y fortalecerá tu cuerpo sino que lo hará también con tu alma." Bernardine.
Es el día 18 ;-)
Hola chicas, acabo de volver del pediatra, resulta que mi peque tiene dermatitis, como ya sospechábamos. Y la cosa es que, gracias a que yo no tomo lácteos, es muy leve. ¡Otra ventaja más del veganismo!
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