Ororo no está testada tampoco. Coyote y Brea sí, pero Brea tiene menos de seis meses. Teniendo en cuenta que Ororo viene de la calle...
Cuando era ella solita, me dijo el veterinario que no la testara si no quería.
Agus me dijo que, si hubiera tenido leucemia, hubiera sido una gata enfermiza. Ella tiene a leucémicos. En Extremadura se los reparten así: Cristina se lleva a los inmunos a Cáceres, Agus a los leucémicos a Badajoz.
Bien cuidados, viven mucho tiempo. Agus siempre dice que ha tenido de todo, desde gatos que mueren a los ocho meses hasta gatos que viven 14 años.
Brea y Coyote, sin haberse visto nunca, eran amigos desde el primer día. Brea estaba muy asustada y creo que a Coyote le dio pena o algo. Coyote había pasado siete años en una casa sin contacto con otros gatos. Nunca había vivido con gatos. De pronto llega a mi casa y vive con dos cachorros. Y adoptó a Brea, porque Brea sí estaba acostumbrada a estar con gatitos y quería amor y jugar. Como Ororo la rechazaba, Coyote la adoptó. Si Brea maullaba porque quería compañía, Coyote iba para allá.
Un adulto a un cachorro no le va a hacer nada. A Coyote, Ororo (AKA la princesa destronada) lo tenía estresadito porque le bufaba a todas horas. Él la miraba como aquel dios que mira a una pulga pasar por su lado. Ororo bufando y Coyote tranquilo tranquilo... De vez en cuando se estresaba y me montaba el brazo.
Me dijeron que los cachorros se adaptan enseguida. Ororo ha estado bufando cinco días y ahora si no ve a Brea le da un soponcio. Duermen Ororo mamando de mi cuello y Brea encogidita al lado de su barriga pegada a mí. Si me muevo, montan un cirio porque tienen que estar juntitas como Pili y Mili. Yo pensaba que, por carácter (Brea es más tranquila que Ororo) no iban a pegar y que me había equivocado adoptando a Brea. Y ahora se aman con locura.
Me han dicho que con dos adultos la cosa cambia, porque son más territoriales, pero puede que no cambie o que el otro gato esté adaptado a vivir con gatos. No sé.