Pues aquí va la mía de ayer. Estaba en un bolo en el que había catering, el menú era spaguetti bolognesa (con salsa aparte, gracias a dios) y pescado asado; las guarniciones puré de patata (de paquete), arroz blanco (con sabor a cartón, que lo había comido el día antes y lo sabía) y repollo hervido. Plato imaginativo resultante: spaguetti con repollo sin ningún tipo de "alegría", y que conste que aunque pregunté si el repollo había sido cocido con algún hueso o carne y me dijeron que no aquello tenía un regustillo raro... :S Resumiendo: comer en casa no tiene precio.
Y el día anterior, en el mismo catering, arroz con guisantes y zanahorias (sabía a cartón, como ya he dicho, o sea, seguro que no engordaba) y de guarnición patatas fritas!!