Nadie dice que a los demás hayan dejado de gustarnos las cosas que antes comiamos. Si no empatizas con el sentimiento, es cuestion de enfocarlo hacia lo que es justo, no es justo para nada que nadie muera por culpa nuestra. Es del todo injusto arrancarle la vida a otros para satisfacer nuestro paladar, y más aún cuando está tan demostrado que es innecesario. Todos merecen vivir y nosotros no somos dioses para ir eligiendo quien debe morir y quien no.