La polémica de la prohibición o permisividad con las corridas se convirtió en recurso para revistas y empresas de moda que, dentro y fuera de España, llevan capotes, mantillas, carteles, cuernos y banderas a portadas y escaparates.


Laura Camino - Galicia Hoxe

Cuando la cultura taurina es más criticada y puesta en tela de juicio que nunca; cuando las voces que reclaman el fin de una fiesta que eleva al máximo nivel a "tortura animal" se escuchan más y más fuertes y las iniciativas anticorridas, en el plano político y legal, avanzan con éxito, coge auge la tendencia de llevar los elementos más cañí -véanse capotes, trajes de luces, faralaes y banderas bicolores- a la pasarela.

Desde que reventó la polémica con la prohibición legal en Cataluña de las corridas de toros, cada vez más empresas y revistas de moda aprovechan el tirón del efecto taurino para llevar a las portadas y escaparates modelos con mantilla o montera. ¡Y olé!

¿Pura inspiración? ¿O es que, como titulaba hace unos días un medio estatal, la moda le está "echando un capote" al mundo de las corridas de toros?

¿Donde está la línea que separa el márketing de la reivindicación? ¿El arte de pasarela de la publicidad?

Rubén Pérez, portavoz de la plataforma Galicia, Mellor sen Touradas, que lidera en Galicia el movimiento antitortura animal, considera que principalmente se trata de una "reivindicación económica", que además hay parte de mensaje protaurino, y que, sobre todo, el más sangrante es la "banalización" que hace la moda, en este y en otros temas cómo lo del uso de las pieles, sin tener en cuenta que "la tauromaquia se basa en el martirio de un ser vivo".

"El mundo de la moda es un mundo banal, las personas que trabajan en él no se preocupan de la ética y de la moral de los productos que emplean", asevera Rubén Pérez, que analiza varios ejemplos recogidos por GH: una galería fotográfica de la modelo Eva Herzigova al estilo torero -hasta con cuernos- para el próximo número de Vanity Fair; una nueva web de venta on-line de productos de la tauromaquia (www.toroshopping.com), desde pulseras hechas con tela de capote hasta trajes de luces pasando por cabezas de toros y espadas de matar; y un reportaje de Yo Dona en la que se entona lo "de España vengo, a España voy". "Intentarán llegar a los turistas poco informados y venderán sus productos dentro de la propia endogamia del mundo taurino, dentro de su ámbito natural, de la gente aficionada y que disfruta de este tipo de espectáculos brutales y aberrantes".

Lleguen o no la un público masivo, la pregunta queda en el aire: ¿venden o reivindican?


ENTREVISTA
"La abolición en Galicia a medio plazo es un objetivo viable"

¿Cree que estos escaparates de moda torera intentan acercar el espectáculo a públicos más nuevos?

No creo, porque la tauromaquia ya se vende desde hace unos años con las revistas de prensa rosa y los medios que hacen comunicación alrededor de los toreros y su vida personal... No creo que le añada un ápice para la juventud. La juventud gallega es de las que más lo rechaza. Por ver una modelo, la mayoría de la gente no dirá "quiero ser torero" o "quiero poner una pulsera de capote". Fuera del mundo taurino, como son muy endogámicos, no creo que tenga mucha más salida. Los turistas sí, porque algunos siguen con tópicos, pero cada vez más rechazan estas cosas.


¿Es correcto aseverar que "la moda le echa un capote a los toreros"?

Tanto esta empresa "toroshopping" como Vanity Fair deben buscar algo en la realización y venta de este tipo de fotografías y artículos. Toroshopping quiere sacar dinero porque es una empresa, y aparte reivindica esto. No sé cuanta gente usará una pulsera de tela de capote, que tampoco tiene un precio asequible. Para nosotros es una banalización.


¿Seguimos anquilosados en la imagen de la España de los toros que se transmite al mundo entero? Lo digo porque Vanity Fair es extranjera...

Sí, caen en el tópico. Intentan relacionar España con toros y paella, cuando España tiene muchísimas cosas más. Galicia no es una paella, no es el símbolo nacional. Lo que hacen con estos tópicos es retrotaernos a la época de la transición cuando España estaba aislada y sólo venían turistas buscando sol. Uno de los problemas que tiene España es que no tiene un turismo de calidad sino de cantidad, que hace que este tipo de tópicos sigan vigentes y supongo que desde las instituciones tampoco les interesará mucho desvirtuar estos tópicos.


¿Como lleváis vuestra campaña contra las corridas de toros en Galicia?

La situación de Cataluña animó a que más gente se active en este camino. La oposición a las corridas de toros sigue creciendo, hay una oposición mayoritaria en Galicia. Y también en las grandes ciudades, como en la Coruña, donde hicimos una encuesta que constató que la mayoría de la ciudadanía rechaza la subvención pública de las corridas de toros.


¿Seguirá Galicia los pasos de Cataluña en cuanto a la prohibición?

La abolición a medio plazo puede ser factible. Sólo falta la voluntad política, sólo falta un empellón de esa oposición que cada vez más políticos de diferentes ideologías ya muestran públicamente, algo que nos satisface y nos da más ilusión para trabajar. Pachi Vázquez dijo hace poco que había mejores cosas en las que invertir el dinero que las corridas de toros. Que lo diga el líder de un partido con tanta representación en Galicia es muy importante para nosotros.
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