...en el siglo en el que estamos y esto sigue pasando...

Denuncian el sacrificio de animales con rituales satánicos en la Fonteta


Los vecinos de la Fuente de San Luis denuncian que hay personas en la zona de la avenida de Waksman que están sacrificando animales durante la celebración de rituales esotéricos. El último caso se ha producido el pasado fin de semana, cuando en un solar próximo al parque de Blancanieves unos residentes encontraron un gallo decapitado, con las patas atadas, desangrado, entre velas y pentagramas dibujados en el suelo. «Hoy mismo -por ayer- todavía estaban los restos del animal y del ritual en el solar, sin que nadie lo haya retirado. Horas después apareció una persona mayor con síndrome de Diógenes y se llevó los vasos y la cazuela», explica indignada Consuelo Buendía, una de las vecinas que se encontró con el dantesco escenario. «Estuvimos esperando más de dos horas en la zona porque no venía la policía. Hicimos una denuncia en la comisaría de la Policía Nacional y al rato, vinieron agentes de la Local y la Nacional. Nos confirmaron que era un ritual de santería», describe Consuelo.

«En este escenario tan detestable había una cazuela con cuscús, un papel con el nombre de una persona, un tal Manuel, velas rojas, copas con sangre, puros, vino, el animal muerto con las patas atadas con una cinta roja y un pentagrama dibujado en el suelo. Lo que sufriría el pobre animal», detalla angustiada Blanca García-Matarredona.

Sensibilización

Tanto Blanca, Consuelo, como la protectora Animal Rights que se ha hecho eco del problema, exigen que el tema no quede impune. «Queremos que estos hechos no sean considerados faltos de importancia o prioridad policial. Que se investigue, ya que el artículo 337 del Código Penal establece penas de prisión de tres meses a un año para quienes maltraten con ensañamiento a animales domésticos causándoles la muerte o lesiones».

También hace unas semanas apareció en la puerta de una vivienda de la calle Fray Juan Monzó un gato ahorcado. «Era un animal que tenía dueño. El chico se fue fuera el fin de semana y dejó el animal en casa a cargo de un amigo, que le daba de comer. El animalito apareció colgado de una cuerda en la puerta. Por eso, queremos que se persigan estos delitos», explican Consuelo y Blanca.

Para evitar estas situaciones, han iniciado una campaña de concienciación pegando carteles por las calles «para que si alguien fue testigo de alguno de estos casos, que nos dé información. Alguien oiría a los animales chillar. Pedimos que se ponga fin a estos delitos, que la policía vigile la zona para ver si pillan a los culpables».

http://www.lasprovincias.es/v/201006...-20100601.html