Iniciado por
Raf
Un veganismo mayoritario nunca podrá decirse que será una postura conservadora. Bueno sí, conservadora de la vida de los animales y de nuesrto medio ambiente.
Y sin necesidad de ser Diógenes, el cascabel está en el gato desde el mismo momento en que somos veganos: No al consumo desaforado, No a la industria explotadora del hombre y de los animaes, No a la muerte, No a la relegación de los animales como meros artículos de consumo, No a este orden equivocado de las cosas. Tú, yo y todos los veganos estamos inmersos de lleno en esa revolución. A veces pienso que es la única posible, mejor dicho el origen de la única posible: compromiso con nosotros mismos, con los más débiles, con lo natural. Ese compromiso, esa fortaleza es la mayor carga de profundidad que podemos utilizar contra este sistema alienante y corrupto porque no hay armas se le puedan oponer. Ahí resultamos imbatibles.
Sólo con esos cascabeles se podría cambiar el mundo. Pero sólo si no jugamos sus cartas, si no actuamos bajo las premisas capitalistas. En el veganismo no hay trampa posible. Creo que es el único motor que puede generar un cambio verdadero en la sociedad. Y por supuesto que estoy contigo, creo, que las organizaciones son el único obstáculo para organizarse.
Sonará utópico pero solo una sociedad vegana logrará acabar con dos siglos de capitalismo y nihilismo mercantil.