El sabor es algo dulzón, pero muy suave, y consistencia agradable tipo queso de Burgos. A mi me ha gustado este queso mucho porque lo veo aplicable a comerlo en dulce: con mermelada, jaleas, mebrillos, incluso igual para hacer alguna tarta, por eso lo pensamos para niños.
Con salado también combina de todos modos.
En la web francesa de donde me inspiré le llaman Gruyere , bueno, a eso la verdad no llega.