Hace aproximadamente un año puse un posteo similar en este foro, si no me equivoco, explicando que no me dejaban ser vegetariana por padecer de anemia ferropénica. Sin embargo la situación cambió.
Mi problema principal es que detesto profundamente la carne, la veo y me de repulsión. Afortunadamente, dado que me recuperé de la anemia me permitieron al menos no comer carne roja (nada de cerdo o de vaca), pero no me dejan prescindir del pollo y del pescado. Especialmente el primero no lo aguanto más. Tampoco me agradan demasiado los huevos y, de los lácteos, sólo me gusta el yogur... pero por tener 17 años mis padres me dan incluso más lácteos de los que necesito.
¿Por qué no me permiten dejar la carne y los derivados animales? Porque tengo bajo peso, pero esa es mi contextura Naturalmente, creen que se trata de un caso de trastornos alimenticios y tengo anorexia, pero no sé cómo hacerles entender que es una cuestión moral y personal hacia la comida, de sentirme pesada, sucia por dentro cuando me dan dichos alimentos. Acostumbro a hablar con ellos del tema, pero todo termina en discusiones molestas, más allá de mi buena capacidad de diálogo.
¿Cómo hago para hacerlos entrar en razón?