Dado que no es la primera vez que oigo casos de médicos impertinentes que niegan una analítica a un vegetariano o ponen pegas para incluir algún parámetro analítico por considerarlo innecesario o un capricho, he pensado que sería una buena idea abrir un hilo en el que la gente pueda compartir sus experiencias, y así ayudar a otros a la hora de afrontar la visita a un médico poco profesional.
La idea será que planteéis aquí vuestras dudas, o vuestros casos para que otros compañeros que hayan pasado por situaciones similares puedan explicaros cómo han solventando ellos el problema o al menos os den ideas de cómo lidiar con este tipo de situaciones tan desagradables a la par que innecesarias.
A modo de reflexión inicial, que de paso os servirá de argumentación básica ante cualquier situación de este tipo, os comento que:
Con la cantidad de dinero que el sistema público de sanidad español se ahorra con la población vegetariana en concepto de tratamientos y medicaciones relacionadas con la diabetes, cáncer, accidentes cardiovasculares y enfermedades coronarias, entre otras muchas dolencias, qué menos que, además de agradecérnoslo, al menos tengan la decencia de aceptar de buen grado un con una sonrisa de oreja a oreja una analítica anual completa. No sólo porque es prácticamente el único gasto que suponemos a la sanidad, sino porque es una estrategia de prevención que a la larga puede suponer un ahorro adicional a la hora de detectar problemas a tiempo.
Así que ya sabéis, sentiros con el derecho cívico y moral de exigir una analítica a placer, que es lo mínimo que os debe la seguridad social con todo lo que se ahorra gracias a vuestro estilo de vida saludable.