La verdad es que dudo muchísimo que en mes y medio te afectase la alimentación hasta ese punto, por muy mal que lo hubieses hecho, si tenías algún problema de nutrición, lo debías arrastrar de antes, o tu desarreglo se debió a otros motivos, hormonales o psicológicos. Si tus análisis están bien, anímate a intentarlo de nuevo, sin miedo. Planifícate menús semanales completos para guiarte y que no te falte de nada