Muy buenas de nuevo, si queda algún escéptico en la sala, que tenga, como yo, más dudas que convicciones, al que le apetezca continuar con el debate, propongo comentar un estudio que encontré hace algún tiempo, se trata de un estudiou llevado a cabo en la Universidad de Missouri con unas conclusiones espectaculares. (espero no me acusen de reflotar un viejo tema, pero en caso contrario se me culparía de crear temas repetidos)
EN ESTE ENLACE ESTÁ UN RESUMEN DEL PAPER, ASÍ COMO UN VIDEO EXPLICATIVO DEL PROCEDIMIENTO Y RESULTADOS: http://biology.missouri.edu/news/new...y-insect-chew/
Para ahorrarme la transcripción de la traducción, copio a continuación la que hizo Carlos Zahumenszky en la página gizmodo.
El debate sobre si las plantas son capaces de sentir daños en su estructura sigue abierto. Quizá no puedan sentir cómo los humanos u otros animales las devoramos, pero un nuevo estudio acaba de confirmar que son capaces de reaccionar ante el sonido que hacen sus depredadores.
Un equipo de investigadores de la Universidad de Misuri (MU) acaba de probar que las plantas, de hecho, reconocen el sonido específico que hacen las orugas cuando se comen sus hojas, y activan mecanismos de defensa para tratar de impedir ser devoradas.
El experimento consistió en varias plantas de hoja carnosa conocidas como Arabidopsis a las que se aplicó un láser para medir hasta el más mínimo sus movimientos. Al depositar una oruga sobre una hoja, la planta reacciona apartando levemente el resto de hojas y segregando más cantidad de aceite de mostaza, un compuesto químico repelente para los insectos.
La segunda parte del experimento consistió en poner a un grupo de plantas junto a un equipo de sonido con el mismo ruido que hacen las orugas al comer, y dejar al resto en silencio. Las plantas sometidas al sonido de masticación de la oruga reaccionaron de la misma manera, alterando la posición del resto de hojas y segregando repelente. En palabras de Heidi Apple, investigadora de la MU, y una de las autoras del proyecto:
El trabajo supone el primer ejemplo de como las plantas responden a una reverberación acústica del entorno. Las vibraciones concretas que produce el sonido de la oruga activa respuestas a nivel celular en las plantas, y hace que segreguen más productos químicos para tratar de repeler al animal.
Ahora queda por determinar qué mecanismo exactamente es el que hace que la planta reaccione a ese sonido y no a otro. [Universidad de Misuri vía Science Recorder]
Mi reflexión viene a ser; aceptando que las plantas ‘oyen’ (entendiendo como oír el percibir un sonido concreto). Y aceptar esto teniendo en cuenta este experimento es obligado (si podemos observar reacciones especificas de las plantas ante este determinado sonido es obvio que lo perciben). Teniendo en cuenta además que todavía no se ha descubierto este mecanismo de recepción, nadie puede no asumir que hay mecanismos desconocidos en las plantas, es decir, que sí reciben el sonido por un mecanismo desconocido (diferente del mecanismo de los animales) también podemos asumir que otros estímulos, como el dolor, pueden ser percibidos por mecanismos también diferentes (no tiene porque ser el sistema nervioso).
Lo que está claro es que la afirmación ‘las plantas no sienten’ se basa en una percepción del dolor muy sesgada y además, es una afirmación del movimiento vegano que no se cuestiona dentro del propio círculo, un auténtico dogma que obvia los últimos descubrimientos de la ciencia, del mismo modo que hace cualquier religión. Si quereis puedo poner muchos más ejemplos de inteligencia y comunicación entre plantas que los últimos ensayos científicos ponen de manifiesto, pero eso solo si estáis dispuestos a debatir y sobre todo, a dudar, si solo sois capaces de verme como un troll no os molesteis en contestar, por favor.
Yo, por mi parte, no tengo dudas que una alimentación vegana es una opción necesaria para un eficiente uso de recursos y, aun aceptando que todos los seres vivos sufren, es el tipo de alimentación que menos sufrimiento genera, ahora bien, afirmar ‘las plantas no sienten dolor’ es un ejercicio pleno de ignorancia.