Es cierto que la industria alimenticia provoca muchísimo más maltrato y sacrificios que, por poner un ejemplo, la taurina. Pero mientras que la primera jamás se extinguirá por mucho que nosotros quisiéramos, la segunda estoy seguro de que sí. Muy poco podremos avanzar en España en favor de los animales mientras se siga consintiendo una matanza por estética y diversión. Por eso considero que es un error no centrarse en la lucha antitaurina, sin desatender otros frentes y continuar promocionando el veganismo como, de forma excelente, hacen ya asociaciones en nuestro país.