Respuesta:
Es normal porque nuestras sociedades no tienen en cuenta o no dan importancia a esta "objeción de conciencia".
Lo que ocurre en el comedor de los colegios es lo mismo que ocurre en los restaurantes o en los entornos familiares de cada cual. El vegetarianismo es una concepción residual que no merece atención y, a la postre, sería una amenaza para esa cultura de la carne tan arraigada en nuestro pais. IN-CON-CE-DI-BLE.
Así pasa. Lo de "es que soy alérgico a la carne" es un recurso multiusos que merece más atención que "no soporto la crueldad hacia otros animales".
El plano físico es muy importante... el plano moral; bah! que me aspen! mejor no tocarlo... Así vamos.
Un saludo.