Hoy han atropellado a mi nene, el cachorrito de cuatro meses de mi hermana. No sé porqué estoy escribiendo esto, estoy con lagrimas en los ojos y no puedo parar de llorar. Todo es una buena mierda y no sé si lo voy a poder aguantar. Nunca me había sentido tan incomprendida en mi dolor, me han llamado mientras estaba en el tren, de vuelta a casa y por poco me da algo. Me he puesto a llorar allí delante, habrán pensado que estoy loca pero me la suda ya todo. No tengo ganas de nada, ni de currar ni de ir a la uni. Todo es un asco.
Flash, t'estimo molt i sempre m'enrecordaré de tu.