Iniciado por
erfoud
La rebelión ciudadana ante la amenaza del cambio climático no debe limitarse a una exigencia de medidas a los poderes públicos, sino (fundamentalmente) en el reconocimiento de que el cambio ha de empezar por nuestro estilo de vida, y ha de ser un cambio profundo, y no cosmético, de reciclaje y cierre de grifos. Yo soy bastante crítico con una gran cantidad de ciudadanos que se aprestan a criticar a los políticos encorbatados pero al mismo tiempo no están dispuestos a hacer concesiones en su modo de vida.
El desarrollo sostenible es un cuento chino; lo único que puede lograr es retrasar la tendencia negativa. Hemos de ser conscientes de que es el mismo sistema económico en que nos encontramos el verdadero problema, y mientras no lo sustituyamos por algo viable, no hay solución, sino parches.Pensad, por ejemplo, que la economía de mercado se sustenta sobre el crecimiento, y todo lo que no sea alimentar el monstruo de producción-consumo eternamente, se considerará como "recesión", "enfriamiento", "crisis" El buen camino está en el crecimiento 0 o negativo, lo cual resulta completamente incompatible para nuestro devorador sistema económico. Podemos etiquetar los productos de "verdes", podemos sentirnos satisfechísimos con nuestras "buenas prácticas medioambientales",pero en el fondo daremos palos de ciego. Si sumamos el pavoroso crecimiento de la población mundial a la creciente sed de recursos y bienes que padecemos, nos daremos cuenta de que las medidas que hay que tomar son mucho más profundas y radicales,medidas que, me temo que ni los poderes públicos ni los mismos ciudadanos estamos dispuestos a tomar.