Muchas gracias por la información, margaly.
Por suerte poco a poco va habiendo alternativas más ecológicas a la hora de comprar papel, no hace mucho encontré en Eroski unos folios de su marca que proceden de cultivos controlados por FSC (Forest Stewardship Council). En el envase pone que el papel procede de bosques bien gestionados y otras fuentes controladas, y que además garantizan el respeto por la biodiversidad y por los derechos humanos de los trabajadores, y no están blanqueados con cloro. A falta de papel reciclado sin blanquear, que no lo encuentro fácilmente, me apaño con éste, que como casi no imprimo nada, me dura siglos, porque soy de las que aprovechan los restos de papel para tomar notas, las listas de la compra y tal, y luego al contenedor azul. Más aún desde que sé lo de Post-it y compañía.