Qué tal estáis? He estado ojeando el foro y me alegra ver que no soy el único "rarito"
Me llamo Jacobo y me hice vegano este verano, lo mío fue un poco drástico porque apenas estuve un par de semanas de ovolacto en agosto y después vegano directamente, recuerdo que en los exámenes de septiembre iba alternando continuamente el servicio con los libros porque mi cuerpo no estaba acostumbrado a tanta fibra
Fueron unos días fantásticos, recuerdo que por aquellos días tuve un sueño en el que me daba cuenta de que estaba soñando y podía hacer lo que quisiera, y mientras me hacía vegetariano me dio la impresión de que me estaba ocurriendo eso mismo pero en la REALIDAD porque me daba cuenta de muchísimas cosas que antes pasaban desapercibidas.
Internamente siempre había sido vegano pero antes no era consciente de que lo que me comía era un animal al que habían tenido que matar.
Sin embargo, aunque siempre he sido hiperoptimista últimamente empiezo a flaquear un poco (anímicamente, porque mi nivel de energía física nunca ha sido tan alto). Mi familia está empeñada en que ha sido una chica la que me ha metido en esto (cuando no conozco a nadie vegano a excepción de una amiga de mi hermana con la que apenas he hablado nunca) y mi madre no hace más que decirme que le estoy amargando la vida cuando yo realmente creo que soy un buen hijo.
Moralmente sólo puedo ser vegano porque lo hago porque creo que los animales y todo el mundo tiene derecho a vivir su vida como le salga de los c*j*n*s.
Pero últimamente estoy pensando en volver a ovolacto, tal vez sea el mejor balance entre mis convicciones y la sociedad. El otro día fuí a una hamburguesería con unos amigos y no había absolutamente nada en la carta que yo pudiera comer. También tengo una chupa de cuero y aunque creo que el mejor honor que puedo rendir al animal que mataron para hacerla es seguir poniéndomela, cada vez que lo hago siento que tengo una doble moral.
Aunque siempre he ido a contracorriente de la sociedad, no se si esto ya es demasiado. A veces me gustaría que alguien me dijera que lo estoy haciendo bien y que no dejara de luchar, pero lo único que escucho es a mi madre diciéndome que me va a dar una anemia y a mi hermano decir que los animales están para comérnoslos.
Joer no me quiero poner triste, ahí va un punto cómico de una conversación que tuve con una exnovia el otro día:
<YO> Es que no entiendo porque la vida de un perro tiene que tener prioridad sobre la vida de un cerdo.
<EXNOVIA> Porque los cerdos están buenos.
Juas, no había caído xDDD
Cuidaros,
Jacobo.