Que bonita la historia
Me hace gracia que se llamen bárbaros a todos los que no son como nosotros, subdesarrollados, tercer mundo, etc... cuando es al contrario.
Pues estos días ando leyendo un libro que me han prestado (Tú eres, luego yo soy de Satish Kumar) y me he encontrado explicaciones muy interesantes acerca de la filosofía en la cual se basa el jainismo, milenaria religión practicada en la India.
Os transcribo un extracto que me ha parecido especialmente revelador...
"La no violencia es común a las cuatro grandes religiones que se originaron en India: hindú, budista, sikh y jainista. sin embargo, los jainistas prestan mucha más atención a la compasión hacia los animales. Ser jainista es sinónimo de ser vegetariano.
Según los eruditos jainistas, existen 8,4 millones de especies sobre la tierra...
...los seres humanos son sólo una de esas 8,4 millones de especies. No tienen más derechos que cualquier otra especie. Todos los seres vivos, humanos o no, tienen el mismo derecho a la vida...
Gurudev nos relató una historia que ejemplifica la actitud jainista hacia los animales.
Una vez había un joven príncipe llamado Parshwanath, quien, a punto de casarse, se dirigía a la casa de su novia. Vio un cercado lleno de animales, todos apretujados, esperando para ser sacrificados. Conmocionado por los lamentos de los animales, el príncipe preguntó: `¿Por qué se mantiene a esos animales en condiciones tan crueles?´. Sus ayudantes respondieron: `Son para la fiesta de tu boda´.
El joven príncipe se sintió abrumado por la compasión. Al llegar a la cámara donde iba a celebrarse la boda, habló con el padre de la princesa:`Todos esos animales atrapados para ser sacrificados para la celebración de la boda deben ser inmediata e irremediablemente liberados´, dijo.
`¿Por qué?´, pregunto el padre, `las vidas de los animales existen para el placer de los humanos. Los animales son nuestros esclavos y nuestra carne. ¿Como puede haber fiesta sin carne?´.
El principe Parshwanath quedó perplejo. No podía creer lo que acababa de escuchar. Exclamó: `Los animales tienen alma, tienen conciencia, son nuestros parientes, son nuestros ancestros. Desean vivir tanto como nosotros; tienen sentimientos y emociones. Sienten amor y pasiones; temen a la muerte tanto como nosotros. Su instinto por la vida no es menor que el nuestro. Su derecho a vivir es tan fundamental como el nuestro. Yo no me puedo casar, no puedo amar y no puedo disfrutar de la vida si hay animales esclavizados y sacrificados.
Sin más ceremonias rechazó los planes para la boda, salió de la cámara, dejó la vida cómoda de príncipe, y respondió a su llamada interior de salir y despertar a las masas adormecidas que han sido condicionadas para pensar de manera egoísta y matar animales para su propio placer y confort.
El reino animal dio la bienvenida a Parshwanath como el profeta de los débiles y los animales. Se acercaron a él. Los pájaros se sentaron sobre los árboles cercanos; los peces llegaron al rincón del lago donde Parshwanath estaba sentado. Elefantes, leones, zorros, conejos, ratas, insectos y hormigas le rindieron homenaje. Un día al ver a Parshwanath bajo la lluvia del monzón, el rey de las cobras se levanto sobre su cola y creó un paraguas con su enorme cabeza. Yo recordaba haber visto la estatua de mármol negro de Parshwanath siendo protegido por la cobra de siete cabezas, en el templo jainista el día anterior.
Gurudev prosiguió: Miles y miles de personas de las aldeas, pueblos y ciudades se sintieron conmovidos por las enseñanzas de Parshwanath. Renunciaron a comer carne y asumieron la labor de proteger a los animales. La princesa que iba a casarse con Parshwanath quedó tan inspirada que decidió permanecer soltera y dedicarse a cuidar de la paz con los animales, el propio rey sufrió una transformación. Anunció que todos los animales deberían ser respetados en su reino, y que no se permitiría la caza, la agresión o el cautiverio de los animales.
Parshwanath fue el vigésimo tercer Gran Libertador (tirthankara) de los animales y de los humanos en la tradición jainista. El vigésimo cuarto fue Mahavir, que vivió hace 2600 años ( ). Todos los veinticuatro Grandes Libertadores tienen un animal asociado a ellos, lo que simboliza que en las enseñanzas jainistas el lugar de los animales es central.
El amor no es amor si no incluye el amor por los animales.
¿Qué clase de compasión será aquella que adora la vida humana, pero ignora el sacrificio de animales?.
La división entre seres humanos y animales, y situar los intereses de los humanos antes que los intereses de los animales, es el principio del seccionalismo, del racismo, del nacionalismo, de la discriminación entre clases y de castas, y por cierto, del especismo.
Este mismo modo de pensar, que esclaviza a los animales, esclaviza a los humanos en nombre de los intereses propios, del interés nacional y de otros estrechos e innumerables intereses. Por eso, nosotros, los jainistas, abogamos por una reverencia incondicional e inequívoca hacia toda la vida."
Espero que os haya gustado, a mi, sencillamente, me ha dejado con la boca abierta...
Un abrazo!
Última edición por veganauta; 13-jul-2008 a las 14:02
...en el brezal, el rey Lear le preguntó a Gloucester: ¿cómo ves el mundo?, y Gloucester, que era ciego, respondió: lo veo con el sentimiento...
...lo veo con el sentimiento.
Que bonita la historia
Me hace gracia que se llamen bárbaros a todos los que no son como nosotros, subdesarrollados, tercer mundo, etc... cuando es al contrario.
Precioso. En Delhi los jainistas tienen un curioso hospital para pájaros heridos.
"El amor es lo único que crece cuando se reparte." A.Saint-Exupery
Que bonito, gracias por compartirlo
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Gracias por esto
Namasté
Levántate. Sonrie. Sigue haciéndolo el resto del día.
Esta reflexión es clave y me parece un punto de inflexión muy importante en nuestra forma de entender las injusticias. Cada vez que sale el tema me resulta inevitable hacer algún comentario al respecto porque, habitualmente, la compasión hacia los animales se quiere entender como un menosprecio hacia la amplia gama de atrocidades cometidas entre humanos. La comparto totalmente con esa plenitud interior que aviva por su entereza y estremece por su contundencia. Pienso que una ceguera insondable afecta a quienes así piensan, pues la injusticia no entiende de sujetos afectados de la misma manera que nuestras subjetividades más primarias expresadas en el rechazo al diferente que canaliza nuestros miedos y otorga seguridad. Una seguridad infantil no superada, por cierto, y una visión del mundo limitante y egocéntrica.Iniciado por veganauta
Aunque los demás animales ya no suponen una amenaza corriente entre nosotros (no así si hablamos de plagas y epidemias en el caso de esos pequeños seres que escapan a nuestro control en momentos puntuales como los insectos, o en constante desafío como algunos virus o bacterias), sí otorgan otro aliciente que sustituye al miedo; el poder disponer caprichosamente de vidas ajenas. Miedo y Poder, Poder y Miedo... la eterna simbiosis que nos impide prosperar.
La compasión, empatía o piedad, rompe ese corrupto molde ayudándonos a mirarnos desde fuera como uno más hasta ser capaces de meternos en la piel de otros individuos muy diferentes. Cuanto más capaces seamos, mejor nos irá en este mundo. Por eso quien es capaz de identificarse con un jilguero ¿cómo no lo va a ser con otra persona?
En este alocado mundo que nos ha tocado vivir, se ve con recelo aquello que no podemos o queremos entender en los demás y enseguida etiquetamos como obsesión, radicalismo o sectarismo, con sus usos peyorativos, a todas esas inquietudes que se salen de la normalidad. No nos entendemos y permanecemos muchas veces impasibles a la espera de que otros den el primer paso. Eso es vivir al día dependiendo de la aceptación mayoritaria. Así uno se siente más seguro, no progresa y lastra al grupo. Ese no sentir mayoritario también puede favorecer una furia incontenible hacia nuestros congéneres porque sólo transmite incomprensión. El humano pasa a ser considerado un ser abobinable al lado del jilguero y nuestra empatía nuevamente condicionada por la obtusa formación de a dos que impone el inamovible molde presto a normalizar un sistema de relaciones que debemos superar empezando por los seres más humildes en su agonía.
Última edición por sujal; 13-jul-2008 a las 15:49
Sí, es absurdo cuantas veces tenemos que oír eso de: "es que yo también pienso en los seres humanos, o en la esclavitud y explotación humanas", como si preocuparse por nuestra relación con los demás seres del planeta fuera excluyente, cuando lo excluyente, precisamente, es diferenciar la injusticia dependiendo de si la sufre un humano o un no humano, sin darnos cuenta de que el sentido de justicia es uno e indivisible y que cualquier justificación o jerarquización de la injusticia, es el motor que la perpetúa.
Imaginaros que mostráis vuestra preocupación por el maltrato, violaciones y asesinatos hacia las mujeres y os salieran con que primero hay que preocuparse de la esclavitud que sufren los obreros de la construcción. Sería absurdo y hasta insultante, ¿no?, pues es lo mismo.
Ante la injusticia, venga de donde venga, vaya a donde vaya, sea la que sea, tolerancia cero.
Y lo más flipante es que estas palabras las escucho el autor en boca de un maestro jainista, hace más de sesenta años...
Abrazos!
Última edición por veganauta; 13-jul-2008 a las 18:37
...en el brezal, el rey Lear le preguntó a Gloucester: ¿cómo ves el mundo?, y Gloucester, que era ciego, respondió: lo veo con el sentimiento...
...lo veo con el sentimiento.
Mmmmm, esto me hace recordar mi visita a Ranakpur, un maravilloso templo jainista en Rajastán (N de India)y la impresión que me produjo ver al clásico monje con la boca cubierta por un paño para evitar tragar algún insecto. Por aquel entonces no era vegetariano (¡tardaría 10 años en serlo!), pero supongo que aquél fue uno de los muchos impactos que uno recibe para llegar a donde he llegado. Está claro que la Ahimsa (no violencia) ha alcanzado con el jainismo cotas jamás superadas en ninguna otra manifestación humana.
Me ha encantado lo que has puesto, Veganauta. Thanks!
Sabes?! esa palabra, Namasté, me encanta, tenía un profesor de yoga que solía recibirnos y despedirnos de esa forma, una vez nos explicó "su" traducción del significado de la misma, que venía a ser algo así como ésto: Reconozco en ti lo más sagrado que hay en mi.... Sencillo y esencial.Iniciado por Allan
Esta noche, he tenido pesadillas... estaba en un matadero, y veía escenas dantescas, bebés de ovejas, muertos de sed, bebiendo la sangre que manaba de una ternera muerta, una vaca siendo electrocutada mientras sus ojos me preguntaban ¿por qué?, cerditos mamando de su madre muerta y ante todo ésto, seres humanxs que se recreaban y burlaban de todo ese sufrimiento mientras ejecutaban, despellejaban y descuartizaban a cientos de animales...
Grité y luché con todas mis fuerzas por escapar de aquello y el nudo en la garganta y el sentimiento de impotencia y violencia que me embargó en sueños, sé que sigue ahí, dentro de mi...
Me gusta este relato y ese saludo, especialmente, porque sé que en el fondo lxs humanxs, cuando matamos a otros animales para comer, desde siempre, incluso cuando ha sido o es por pura necesidad, incluso antes del nacimiento del jainismo (hace casi 3000 años), entramos en conflicto con nuestra propia naturaleza, con nuestra conciencia y con nuestra compasión y le declaramos la guerra a lo más sagrado que hay en nosotrxs.
Quizá llegó el momento de hacer las paces con nosotrxs mismxs y con el mundo de una vez por todas.
Ojalá...
Namasté!
...en el brezal, el rey Lear le preguntó a Gloucester: ¿cómo ves el mundo?, y Gloucester, que era ciego, respondió: lo veo con el sentimiento...
...lo veo con el sentimiento.
yo a veces lo que me he preguntado leyendo este foro es si no hay una jerarquización de la injusticia, pero a favor de los animales no humanosIniciado por veganauta
Los seres son dueños de sus actos, herederos de sus actos, hijos de sus actos; todo acto que cometan, sea bueno, sea malo, de aquél acto heredarán.