Yo he trabajado 3 nochebuenas y es cuando he sentido realmente la magia de la noche. Aún cuando empecé la jornada fastidiada por trabajar todos los festivos, sin cobrar de más, luego empecé a sentir algo raro dentro y pensé, "bueno, estoy cuidando enfermos, ¿que mejor forma de pasar la navidad? mucho mejor esto que celebrar una comida que no me apetece con familia que no me cae bien y todo ese teatro". Y me sentí muy feliz y afortunada de estar allí y no en otra parte. Yo creia que el espiritu navideño era un invento de las tiendas hasta ese dia.