¡Por dió, cómo me alegro de vivir en Gijón! Aunque llueva y esté ahora mismo más de otoño que de verano...
Para el calor yo diría que paciencia. Reajustar objetivos, porque se reduce mucho la resistencia del cuerpo; hidratarse bien durante el día, proteger la cabeza en lo posible, y ser consciente de que las fuerzas van a ser mucho menores.
A todos los "locos" que madrugáis, ¡os admiro infinito! Yo soy ave nocturna, pero de salir muy muy de noche; no hay nada que me guste más que volver a casa a las 12 de la noche después de un buen entreno a oscuras y en soledad, jeje! Suerte que no tengo niños y me puedo arreglar genial con los horarios.