Perdona, pero no puedo evitar intervenir. Como me imaginaba, bebes mucho del taoísmo, que buscaba por encima de todo la inmortalidad. Pues bien, por lo que dices, creo que no has entendido el verdadero sentido del Tao, ni siquiera del Dao De Jing, el libro de Lao Tse.
Para empezar que el Tao no se puede expresar con palabras: "el Tao que se nombra no es el verdadero Tao". Se puede traducir, en efecto, como ley, como orden, pero no significan eso realmente. Para llegar a comprehender de alguna manera su sentido, es condición sine qua non hacerlo mediante la palabra inacción. La inacción es la práctica del hombre sabio en la vida mundana, de aquel que ha llegado a comprender el Tao en profundidad. Y la inacción es eso mismo, la ausencia de toda intervención humana en el transcurrir del universo. Sólo de esa manera el Tao fluye sobre la tierra, y la ley del Cielo se expande por doquier. Es decir, el Tao es ley, es orden, pero es en sí un enigma, es un misterio que sólo podemos dejar actuar a través de la inacción.
Por todo eso, te digo que no has entendido el sentido del Tao si afirmas que nosotros tenemos que ordenar algo. El hombre no debe ordenar nada, ni es la medida de todas las cosas; debe dejar que el Tao lo guíe a el. Y mucho menos si dices que el mundo está hecho a imagen y semejanza nuestra y que por eso es ordenado y es verdadero y todo ese rollo. En este mundo ya no hay Tao, quizá por eso vayamos tan mal. Tal vez es hora de que dejemos hablar al mundo y nos callemos, y no tratemos de ordenar nada como dices.
El Dao De Jing, por cierto, es uno de los primeros, sino el primero, manifiestos a favor del anarquismo social. En relación con la inacción, reivindicaba que para que el verdadero orden reinara entre los hombres debía dejarse el gobierno de estos al azar, a la espontaneidad y al curso natural de los acontecimientos, nada de leyes ni monarcas.
La obtención de la inmortalidad según el taoísmo es muy complicada de entender, porque es muy abstracta. Yo no tengo ni idea. Pero tenía que ver con la alquimia interior y exterior, es decir, con una especie control sobre el cuerpo (una de las cosas que creo había que hacer era no tener relaciones sexuales para guardar el esperma, que contenía la energía yin originaria) y luego con mejunjes de plantas, metales como el mercurio, etc. Ya me dirás qué haces de todo esto para obtener la inmortalidad. ¿No chingas Mikael? ¿Ya te haces tus infusiones de mercurio por las mañanas?
De todas formas, estamos hablando de una doctrina de antes de Cristo. Que puede llegar a ser muy reveladora en según qué cosas, vale, pero de ahí a tomarla como la verdad y creernos que podemos alcanzar la inmortalidad... y no hables de que sigues una lógica y una argumentación cuando si en algo se caracteriza esta filosofía es por ser totalmente especulativa y abstracta. Es imposible que pueda estar sujeta a la verdad o a la mentira.
De hecho, el taoísmo prácticamente desapareció y fue absorbido por el budismo y el confucianismo en Oriente. Vamos, que no se lo creían ni ellos, y mira que pueden llegar a ser especulativos los orientales.
No sé ahora mismo ni a dónde quería llegar diciendo todo esto... en fin, no sé, que yo de ti me dejaría de rollos y pondría los pies un poco encima de la tierra. Que si de verdad quieres que el orden del Universo reine sobre el mundo de los humanos debes dejar que el mundo hable y no tanto que hablemos nosotros. Y, ¿sabes qué pienso? Que el mundo ahora grita que dejemos de ser egoístas, que dejemos de matar y de provocar sufrimiento, y que mañana ya veremos. El Tao nos habla pero no le hacemos caso, ya ves.
Lo siento por el tochaco...:eing: