PACMA en un debate sobre Tauromaquia en Intereconomía

Estoy totalmente de acuerdo. Los habrá que sí estén preocupados por el aborto, pero qué casualidad que prácticamente sólo hablen de ello cuando está la política de por medio. Es probable que la mayoría de las personas que realmente están preocupadas por el aborto nunca han estado en esas reuniones politizadas ni andan criticando a los que nos preocupamos por los animales. Lo intentan plantear como dos cosas incompatibles, cuando no hay dos cosas más compatibles que la preocupación por la vida humana y el rechazo al maltrato animal. Yo fui a un acto contra las corridas de toros y luego anduve discutiendo con amigos y gente que estaba a favor o simplemente estaba en contra de estar en contra. Pues bien, de todos los argumentos que escuché no hubo uno solo que me hiciera replantearme por un momento mi postura, ni siquiera pensar "bueno, por ahí pueden tener razón", lo que habla de la poca base de los argumentos protaurinos. De hecho, la mayor parte de los argumentos ni siquiera eran válidos para el tema que estábamos tratando, eran intentos de desviar la atención hacia otro sitio o razonamientos tipo "por qué protestas contra eso y no contra otra cosa?", "es algo que se ha hecho toda la vida", "en otros sitios se hacen otras cosas", "el que no quiera que no vaya a verlo", etc. También había gente que defendía las corridas de toros mientras aseguraba amar fervientemente a sus mascotas, llevarles al centro de estética canina, etc. Contando esto, supuestamente querían parecer muy preocupados por los animales, eso sí, por los que les pertenecen, tienen un certificado y su correspondiente pedigree. Los demás no cuentan, son de relleno.
Eso en cuanto a las frases que al menos tocaban levemente el tema que se trataba, porque aparte de eso escuché también montones de disparates sobre el supuesto perfil al que correspondemos todos los antitaurinos por definición, lista de sectas de las que supuestamente somos miembros -por orden de destructividad- lista de supuestas contradicciones clamorosas en nuestro modo de vida, relación de sustancias que necesariamente fumamos antes de ir a las manifestaciones, etc. Aparte de eso, poco argumento sólido, por no decir ninguno.
Al final, para mí el debate real se reduce a algo tan sencillo como "veamos, a usted ¿le importa que un animal -con su piel, sangre, ojos, etc- sufra innecesariamente, o le resbala por completo?". Si la respuesta es que no le importa, no es necesario debatir más; si la respuesta es que sí le importa, tampoco seguirá ese debate en particular porque esa preocupación, si es real, le lleva a uno directamente a hacerse antitaurino. Pero hay mucha gente que nunca se ha parado a analizar su propia sensibilidad o sus propias ideas, es más cómodo señalar al de al lado y empezar a ponernos etiquetas sólo porque nos preocupamos por algo más que nuestro ombligo.