-
En momentos de desesperación por esas cosas me gusta tener en mente un lema que se usó en unas camisetas de un colectivo en el que milité unos años.
"I malgrat tot, no ens faran perdre el somriure"
"Y a pesar de todo, no nos harán perder la sonrisa"
Un besazo!
-
Yo también me he subido a esa montaña rusa ;) Para mí eso que explicas es lo realmente difícil de ser vegana, porque el ser vegana no deja de ser una consecuencia del haber ido tomando conciencia de una realidad que antes presentía pero tapaba y que ahora miro de frente. A veces llena de energía, otras sin esperanza, en un mundo que no parece el mío, soy la misma pero veo cosas que antes me pasaban por alto y que la mayoría no pueden ver.
Yo tampoco tengo una receta para sobrellevarlo pero lo que tengo claro es que estoy contenta de tener esta conciencia, aunque también me pueda hacer sufrir. Hay que ser positivos, así es como podemos ofrecer lo mejor de nosotros y hacer más por los animales.
Ánimos a todos los que esteis de bajón existencial :)
-
Somos así. Vemos, lo que la mayoría de la sociedad no puede ver.
Vemos, lo que antes muchos de nosotros no veíamos. Ya no hay marcha atrás.
En cierto modo si que es una condena de por vida porque uno "ve" y "siente" constantemente las injusticias a las que están sometidos otros seres vivos al mismo tiempo que sabemos que estamos atados de manos y que el camino en esta lucha es largo y tortuoso.
No me queda consuelo en esta tierra salvo por la frase "one day will come" que para mí resume la profunda esperanza de que todos los que han sufrido, sufren y van a sufrir hayan encontrado y puedan encontrar la libertad, armonía y felicidad que el hombre les ha arrebatado desde antes de nacer, no aquí en esta tierra, sino en su propio paraiso.