JG Entrenador personal
17-may-2011, 21:24
Es mucha la desinformación que la sociedad actual tiene acerca de algunos hábitos de vida. Los medios divulgan falsos estereotipos de vida regidos por intereses terceros que a nosotros los habitantes nos benefician bien poco.
Las grandes empresas dominan el mundo. Y desgraciadamente un estilo de vida que se basa en el respeto, la igualdad y la ética como es el veganismo no es bien recibido entre la mayoría de empresas y gobiernos. Claro, es justo lo contrario a lo que siempre se ha vendido y se vende. Es justo el extremo opuesto a la principal potencia comercial de alimentos, que es el sector de los alimentos de origen animal.
Nunca he oído decir en televisión ni en la radio que comer carne no esté bien, ni que ser vegetariano sea posible. A decir verdad la mayoría de veces que aparece el termino vegetariano en los medios suele acabar siendo ridiculizado. ¿Por qué? Porque no les interesa que el pueblo vea lo que hay detrás de esas bonitas y suculentas hamburguesas, no les interesa que la gente sepa porque está bebiendo con cuarenta años la leche materna de un animal de otra especie, porque no les interesa que el pueblo hable, que el pueblo abra los ojos.
Nos muestran lo buena que está la carne animal, las propiedades beneficiosas que tiene el huevo, la leche. Pero no nos dicen que la mayoría de enfermedades que se conocen actualmente están provocadas por el consumo de alimentos de origen animal, no nos dicen que tenemos una dentadura plana, diseñada para masticar y moler los vegetales, y no para desgarrar la carne. No nos dicen por qué no podemos comer carne cruda, y porque tenemos un estómago demasiado largo para digerirla.
Tampoco nos dicen que la leche de vaca procede de un animal al que han estado embarazando manualmente para provocar la creación de leche materna, una y otra vez, para extraer esa leche y venderla. Una leche que debería ser el alimento de un bebé, su bebé. Ni nos dicen que cerca del 90% de la población mundial tiene intolerancia a la lactosa, ya que una vez pasada la niñez, perdemos la enzima lactasa, que se encarga de la correcta asimilación y absorción de la leche. No nos dicen que ese bebé luego lo matan para hacer la deliciosa carne de ternera, que no es más que un bebé asesinado y descuartizado. (Sí, la carne de ternera es carne de bebé)
No nos dicen que todos esos alimentos están infestados de hormonas, drogas, medicamentos, pesticidas, conservantes, colorantes…
Podemos vivir sin ingerir alimentos de origen animal, pero moriríamos si no comiéramos vegetales. ¿Y esto? Tampoco lo dicen.
La sociedad en la que vivimos es una farsa, una gran mentira cuyo único propósito es beneficiar a unos pocos destruyendo la vida de unos muchos. Ningún político se preocupa por su pueblo, ninguno. Ningún gran empresario piensa en sus trabajadores. El único interés que tienen es su propio beneficio. No nos dejemos engañar, a nadie le importamos.
Esa es la realidad, y ahora quiero que todos nos detengamos y reflexionemos sobre nuestros actos. ¿Es justo lo que hacemos? ¿De verdad no se puede hacer nada?
Ni es justo ni nos vamos a quedar con los brazos cruzados.
Aquí es donde aparece la oposición a estos actos, aquí es donde aparece la respuesta, la revolución, la emancipación espiritual de todos aquellos que en su día estuvieron cegados y abrieron los ojos, aquí es donde surge el veganismo.
El veganismo es una respuesta adoptada para contrarrestar todas estas injusticias, es una oposición, el veganismo es un estilo de vida que grita a los cuatro vientos que nunca más volverá a contribuir al sufrimiento, la agonía y la crueldad.
Bien, esto es lo que ha hecho movilizar a miles de personas, un número que cada día va en aumento, y cada día es más fuerte.
Como buen vegano, yo también aporto mi granito de arena a todo este movimiento.
He decidido que no voy a esconder por nada del mundo lo que soy y lo que hago, y por ello he decidido que voy a involucrar el veganismo en mi trabajo todo lo que pueda en la medida de lo posible.
Yo soy Jorge García, y soy entrenador personal. Soy vegano y activista por los derechos de todos y cada uno de los animales.
Voy a demostrar al mundo que cualquier persona puede llevar una alimentación vegetariana y practicar deporte en cualquier medida. Voy a demostrar que se puede aumentar considerablemente de masa muscular ingiriendo únicamente proteínas de origen vegetal. Ya son muchxs lxs deportistas profesionales, campeonxs mundiales y medallistas que lo demuestran con su alimentación 100% vegetariana.
Es hora de que todos intentemos introducir esta forma de vida en el mundo laboral.
Médicxs, nutricionistas, enfermerxs, cerrajerxs, dentistas, dependientes, cocinerxs, diseñadorxs, actores/actrices, directorxs, profesorxs, cajerxs, taxistas, vendedorxs, esteticistas, peluquerxs, masajistas o como en mi caso, entrenadorxs.
Podemos crear una gran red laboral, acercarnos lxs unxs a lxs otrxs. Una red de trabajo donde todo sea libre de crueldad animal. Si yo necesito comida, acudiré a una tienda de comida cuyos propietarixs sean veganxs, si necesito ropa, acudiré a un/a veganx que la proporcione, si quiero hacerme un tatuaje acudiré a un/a tatuador/a veganx, si quiero ir a la peluquería, a un bar, a un restaurante, a una esteticien, a un gimnasio o simplemente quiero ir a algún lugar a tomar un refresco acudiré a ese en el que sepa que no habrá absolutamente nada de origen animal y podré estar a gusto.
Aclaro que no estoy fomentando el consumismo, más bien propongo que si se ha de consumir, que sea entre nosotrxs. De ese modo los precios de los productos veganos disminuirían debido a la demanda, los que no existan se fabricarán y entre nosotrxs estaremos más unidxs para todo.
Últimamente lo único que veo es que cada vez somos más, pero estamos más separadxs. Entre organizaciones existen rivalidades y nos vamos dividiendo en grupos pequeños en lugar de formar uno grande porque unxs quieren actuar de una manera y otros de otra.
Se pueden separar las personas porque cada una piense que las cosas se deberían hacer de una forma o de otra, pero aún así continuaríamos unidxs si acudimos lxs unxs a lxs otrxs para solucionar nuestros problemas o caprichos.
Creo que el primer paso que se debería tomar es crear una red social o página web laboral vegana, donde se puedan clasificar los oficios y cada vegano pueda anunciar su comercio o servicios distribuyéndose por áreas o poblaciones. De ese modo cualquiera podría buscar lo que necesite.
Lamentablemente yo no doto de conocimientos de edición web. Si alguien entiende de ello y está dispuestx a ayudar, que lo haga.
Debemos movilizarnos YA! Debemos hacernos ver en todos los puntos posibles. Si los medios no quieren mostrar la verdad, tenemos que hacerlo nosotros. Introducir el veganismo en el mundo laboral es una gran iniciativa hacia un mundo más justo y moral.
Unámonos y hagámonos ver. Pongamos nuestro granito de arena.
Jorge García, entrenador personal vegano.
Las grandes empresas dominan el mundo. Y desgraciadamente un estilo de vida que se basa en el respeto, la igualdad y la ética como es el veganismo no es bien recibido entre la mayoría de empresas y gobiernos. Claro, es justo lo contrario a lo que siempre se ha vendido y se vende. Es justo el extremo opuesto a la principal potencia comercial de alimentos, que es el sector de los alimentos de origen animal.
Nunca he oído decir en televisión ni en la radio que comer carne no esté bien, ni que ser vegetariano sea posible. A decir verdad la mayoría de veces que aparece el termino vegetariano en los medios suele acabar siendo ridiculizado. ¿Por qué? Porque no les interesa que el pueblo vea lo que hay detrás de esas bonitas y suculentas hamburguesas, no les interesa que la gente sepa porque está bebiendo con cuarenta años la leche materna de un animal de otra especie, porque no les interesa que el pueblo hable, que el pueblo abra los ojos.
Nos muestran lo buena que está la carne animal, las propiedades beneficiosas que tiene el huevo, la leche. Pero no nos dicen que la mayoría de enfermedades que se conocen actualmente están provocadas por el consumo de alimentos de origen animal, no nos dicen que tenemos una dentadura plana, diseñada para masticar y moler los vegetales, y no para desgarrar la carne. No nos dicen por qué no podemos comer carne cruda, y porque tenemos un estómago demasiado largo para digerirla.
Tampoco nos dicen que la leche de vaca procede de un animal al que han estado embarazando manualmente para provocar la creación de leche materna, una y otra vez, para extraer esa leche y venderla. Una leche que debería ser el alimento de un bebé, su bebé. Ni nos dicen que cerca del 90% de la población mundial tiene intolerancia a la lactosa, ya que una vez pasada la niñez, perdemos la enzima lactasa, que se encarga de la correcta asimilación y absorción de la leche. No nos dicen que ese bebé luego lo matan para hacer la deliciosa carne de ternera, que no es más que un bebé asesinado y descuartizado. (Sí, la carne de ternera es carne de bebé)
No nos dicen que todos esos alimentos están infestados de hormonas, drogas, medicamentos, pesticidas, conservantes, colorantes…
Podemos vivir sin ingerir alimentos de origen animal, pero moriríamos si no comiéramos vegetales. ¿Y esto? Tampoco lo dicen.
La sociedad en la que vivimos es una farsa, una gran mentira cuyo único propósito es beneficiar a unos pocos destruyendo la vida de unos muchos. Ningún político se preocupa por su pueblo, ninguno. Ningún gran empresario piensa en sus trabajadores. El único interés que tienen es su propio beneficio. No nos dejemos engañar, a nadie le importamos.
Esa es la realidad, y ahora quiero que todos nos detengamos y reflexionemos sobre nuestros actos. ¿Es justo lo que hacemos? ¿De verdad no se puede hacer nada?
Ni es justo ni nos vamos a quedar con los brazos cruzados.
Aquí es donde aparece la oposición a estos actos, aquí es donde aparece la respuesta, la revolución, la emancipación espiritual de todos aquellos que en su día estuvieron cegados y abrieron los ojos, aquí es donde surge el veganismo.
El veganismo es una respuesta adoptada para contrarrestar todas estas injusticias, es una oposición, el veganismo es un estilo de vida que grita a los cuatro vientos que nunca más volverá a contribuir al sufrimiento, la agonía y la crueldad.
Bien, esto es lo que ha hecho movilizar a miles de personas, un número que cada día va en aumento, y cada día es más fuerte.
Como buen vegano, yo también aporto mi granito de arena a todo este movimiento.
He decidido que no voy a esconder por nada del mundo lo que soy y lo que hago, y por ello he decidido que voy a involucrar el veganismo en mi trabajo todo lo que pueda en la medida de lo posible.
Yo soy Jorge García, y soy entrenador personal. Soy vegano y activista por los derechos de todos y cada uno de los animales.
Voy a demostrar al mundo que cualquier persona puede llevar una alimentación vegetariana y practicar deporte en cualquier medida. Voy a demostrar que se puede aumentar considerablemente de masa muscular ingiriendo únicamente proteínas de origen vegetal. Ya son muchxs lxs deportistas profesionales, campeonxs mundiales y medallistas que lo demuestran con su alimentación 100% vegetariana.
Es hora de que todos intentemos introducir esta forma de vida en el mundo laboral.
Médicxs, nutricionistas, enfermerxs, cerrajerxs, dentistas, dependientes, cocinerxs, diseñadorxs, actores/actrices, directorxs, profesorxs, cajerxs, taxistas, vendedorxs, esteticistas, peluquerxs, masajistas o como en mi caso, entrenadorxs.
Podemos crear una gran red laboral, acercarnos lxs unxs a lxs otrxs. Una red de trabajo donde todo sea libre de crueldad animal. Si yo necesito comida, acudiré a una tienda de comida cuyos propietarixs sean veganxs, si necesito ropa, acudiré a un/a veganx que la proporcione, si quiero hacerme un tatuaje acudiré a un/a tatuador/a veganx, si quiero ir a la peluquería, a un bar, a un restaurante, a una esteticien, a un gimnasio o simplemente quiero ir a algún lugar a tomar un refresco acudiré a ese en el que sepa que no habrá absolutamente nada de origen animal y podré estar a gusto.
Aclaro que no estoy fomentando el consumismo, más bien propongo que si se ha de consumir, que sea entre nosotrxs. De ese modo los precios de los productos veganos disminuirían debido a la demanda, los que no existan se fabricarán y entre nosotrxs estaremos más unidxs para todo.
Últimamente lo único que veo es que cada vez somos más, pero estamos más separadxs. Entre organizaciones existen rivalidades y nos vamos dividiendo en grupos pequeños en lugar de formar uno grande porque unxs quieren actuar de una manera y otros de otra.
Se pueden separar las personas porque cada una piense que las cosas se deberían hacer de una forma o de otra, pero aún así continuaríamos unidxs si acudimos lxs unxs a lxs otrxs para solucionar nuestros problemas o caprichos.
Creo que el primer paso que se debería tomar es crear una red social o página web laboral vegana, donde se puedan clasificar los oficios y cada vegano pueda anunciar su comercio o servicios distribuyéndose por áreas o poblaciones. De ese modo cualquiera podría buscar lo que necesite.
Lamentablemente yo no doto de conocimientos de edición web. Si alguien entiende de ello y está dispuestx a ayudar, que lo haga.
Debemos movilizarnos YA! Debemos hacernos ver en todos los puntos posibles. Si los medios no quieren mostrar la verdad, tenemos que hacerlo nosotros. Introducir el veganismo en el mundo laboral es una gran iniciativa hacia un mundo más justo y moral.
Unámonos y hagámonos ver. Pongamos nuestro granito de arena.
Jorge García, entrenador personal vegano.