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Ver la versión completa : Ciencia Hallan en la Antártida el mayor cráter de impacto de la Tierra



Aljandar
28-ago-2010, 01:08
Es tres veces mayor que el cráter de Chicxulub donde cayó el meteorito que extinguió a los dinosaurios


JOSÉ MANUEL NIEVES / MADRID
Día 27/08/2010 - 11.36h

Es tres veces mayor que el cráter de Chicxulub, en el Golfo de México, donde cayó el meteorito de 10 km. que extinguió a los dinosaurios hace 65 millones de años. El cráter tiene 500 km. de diámetro (contra los 170 del de Chicxulub) y se formó hace 250 millones de años tras el impacto de un objeto de unos 50 km.
El nuevo cráter, que se encuentra bajo una capa de más de un km. de hielo, fue observado por primera vez en 2006 con los radares de gravedad y subsuelo de los satélites GRACE, de la NASA, y desde entonces ha despertado el interés de los científicos.


http://www.abc.es/Media/201008/27/Impacto%20Antartida--478x270.jpg

Los datos obtenidos sobre el terreno indican que la impresionante roca espacial cayó hace unos 250 millones de años, coincidiendo con la gran extinción que tuvo lugar en la frontera de los periodos Pérmico y Triásico. Durante aquél trágico episodio, desapareció cerca del 90% de todas las formas de vida del planeta.
Su localización geográfica, al este de la Antártida y debajo de Australia, en la región conocida como Tierra de Wilkes , sugiere a su vez que el enorme meteorito también tuvo algo que ver con la ruptura del supercontinente Gondwana, creando o acelerando la falla tectónica que desde entonces empezó a empujar Australia hacia el norte.
Los paleontólogos están convencidos de que fue precisamente la gran extinción del Pérmico-Triásico la que hizo posible el desarrollo y posterior dominio de los dinosaurios, cuyo reinado en la Tierra duró cerca de 80 millones de años. Más tarde, tras el impacto que abrió el cráter de Chicxulub, la historia volvió a repetirse. Los dinosaurios (y cerca del 70% de la vida en la Tierra) se extinguieron y dejaron el campo libre para que los primeros mamíferos se desarrollaran y tomaran el control.
"El impacto de Tierra de Wilkes -explica Ralph von Frese, profesor de Ciencias Geológicas en la Universidad Estatal de Ohio y uno de los descubridores del cráter- es mucho mayor que el que mató a los dinosaurios, y probablemente causó en aquella época daños catastróficos".
A pesar de todo, por sí sola, la enorme estructura de 500 km. no prueba gran cosa. Pero tras largos años de estudio y de comparación con otros cráteres (en la Tierra y en la Luna), han conseguido despejar una buena parte de las dudas. "Existen en la Luna -afirma von Frese- por lo menos veinte cráteres de impacto de este tamaño o incluso mayores, por lo que no resulta sorprendente encontrar uno aquí".
Sin embargo, a diferencia de lo que sucede en la Luna, la intensa actividad atmosférica y geológica de la Tierra ha conseguido borrar o enterrar (como es el caso), la mayor parte de estas viejas cicatrices.
Pese a su convicción, von Frese y Laramie Potts (el otro descubridor del cráter) admiten que sus datos están abiertos a otras interpretaciones. De hecho, e incluso con las modernas técnicas basadas en radares de gravedad, los científicos apenas si están empezando a comprender lo que sucede en el interior de nuestro planeta.
"Basándonos en lo que sabemos sobre la historia geológica de la región -asegura von Frese- la estructura se formó probablemente hace cerca de 250 millones de años". Algo más tarde, hace unos cien millones de años, Australia se separó de Gondwana e inició su larga y solitaria marcha hacia el norte, que continúa en la actualidad. La falla que provocó la ruptura cruza el gran cráter casi por su centro, lo que sugiere que, como mínimo, el impacto aceleró su formación.
Con todo, opina el científico, las pruebas definitivas de la hipótesis del impacto descansan aún bajo tierra, en antiguas rocas que están a la espera de futuras expediciones científicas que las desentierren.

http://www.abc.es/20100827/ciencia/crater-antartida-201008271025.html

sujal
28-ago-2010, 07:04
Ejem, qué frágiles somos ante la inmensidad del universo. En cualquier momento nos aplasta un pedrusco de esos.

Alex
28-ago-2010, 08:26
Ejem, qué frágiles somos ante la inmensidad del universo. En cualquier momento nos aplasta un pedrusco de esos.

Y además que sí, que lo mismo da que estemos que no, que nadie se iba a enterar, para que luego digan que el hombre es la medida de todas las cosas.

Alex

ospasbar
28-ago-2010, 14:10
Pues dicen que viene uno para el 2029 o por ahí...

ospasbar
28-ago-2010, 14:15
El acercamiento a la Tierra en 2029 de un asteroide activa la defensa espacial
Apofis pasará a menor distancia que los satélites geoestacionarios y puede chocar en 2036
MALÉN RUIZ DE ELVIRA - Madrid - 23/02/2007



El 13 de abril de 2029 un pedrusco espacial de unos 300 metros de longitud, bautizado Apofis, pasará tan cerca de la Tierra que rozará la órbita donde se alinean los grandes satélites de comunicaciones, a 36.000 kilómetros de altura. Descartada la colisión en ese pase, los últimos cálculos, siempre provisionales, indican que existe un riesgo de choque con el planeta siete años después. Mientras los astrónomos y las agencias espaciales vigilan continuamente el asteroide, la ONU y otros organismos discuten, todavía de manera informal, la posibilidad de hacer algo para desviarlo.

El asteroide Apofis es de los pocos que han merecido un nombre, entre los centenares que los astrónomos vigilan sistemáticamente por resultar incómodos para la Tierra por su proximidad. Apofis es el nombre griego del demonio egipcio Apep, que representaba el caos y atacaba a Ra (para los egipcios el dios Sol), causando los eclipses solares. El nombre se lo han puesto sus descubridores, astrónomos estadounidenses que lo vieron por primera vez en 2004.

Los últimos cálculos sobre el acercamiento de Apofis en 2029 y el posible impacto en 2036 los han hecho los científicos que mantienen Neodys, un sistema pionero de vigilancia de los objetos celestes cercanos a la Tierra. De los cálculos se responsabiliza la matemática española María Eugenia Sansaturio, que maneja desde Valladolid la base de datos duplicada de este sistema, establecido por Andrea Mirani en la Universidad de Pisa. El asteroide pasará el 13 de abril de 2029 a unos 38.000 kilómetros del centro de la Tierra (la Luna está 10 veces más lejos, a 384.000 kilómetros), con riesgo cero de impacto. En 2036, a causa de la perturbación producida en 2029 por la proximidad de la Tierra, la probabilidad de impacto aumenta a una entre 50.000.

Apofis da la vuelta al Sol en una órbita muy parecida a la de la Tierra. Por eso se encuentra con ella periódicamente. Se han calculado sus acercamientos y antes de 2029 lo hará en 2013 y 2021. Si un asteroide de este tamaño chocara con la Tierra, es muy probable que provocara una gran destrucción localizada y que afectara también al clima. Los científicos han realizado incluso simulaciones de tsunamis tras el impacto en el Pacífico.

Sansaturio, que es también presidenta de la Fundación Spaceguard España, recuerda que la generación actual tuvo ocasión de observar el choque del Cometa Shoemaker-Levy con Júpiter en 1994, lo que hizo que se diera cuenta más claramente del riesgo que representan los asteroides y cometas. Aunque está en contra del tratamiento sensacionalista, "el caso del Apofis es extraordinario" explica, "porque la órbita va a cambiar en 2029". Sin embargo, para calibrar el riesgo, se tiene en cuenta el tiempo que falta para la posible colisión ya, que, como recuerda Sansaturio, "con unos años de preaviso se pueden desarrollar nuevos recursos tecnológicos".

El Observatorio Astronómico de Mallorca colabora con Neodys en el seguimiento de los cuerpos cercanos a la Tierra. Su director, Salvador Sánchez, comenta que las últimas observaciones de Apofis se hicieron en septiembre desde Mauna Kea (Hawai) y que el observatorio está intentando fotografiarlo estos días. Apofis le parece importante, pero cree que puede haber un susto mayor antes de 2029. "No se están siguiendo los asteroides de entre 100 y 300 metros y hay muchísimos". Recuerda que un cuerpo en ese rango de tamaño fue la causa del espectacular suceso de Tunguska (Siberia) en 1908, aunque, de todas formas, el 20% del riesgo no corresponde a los asteroides sino a los cometas, que pueden dar mucho menos preaviso.

No es Sánchez el único preocupado. El Congreso de Estados Unidos ha pedido a la NASA que establezca medios para detectar y rastrear estos pequeños cuerpos. Hasta ahora el objetivo eran los asteroides de más de un kilómetro. Dentro de unos días, se espera que la NASA presente sus planes en el II Congreso de Defensa Espacial en Washington. Los demás países dedican mucho menos dinero a la amenaza espacial, que en Europa podría integrarse en el futuro en las actividades de seguridad. Neodya, por ejemplo, a pesar de ser la referencia y de que de él surgió el sistema paralelo que posee ahora la NASA, no tiene todavía financiación estable.

Mientras tanto, la Sociedad Planetaria, fundada por el famoso divulgador Carl Sagan, ha convocado un concurso para obtener datos más refinados de la órbita de Apofis e ideas sobre cómo hacer que deje de ser una amenaza para la Tierra. En este terreno se mueve la Agencia Europea del Espacio (ESA), que seleccionó el proyecto Don Quijote, presentado por la empresa española Deimos. Andrés Gálvez, que gestiona el programa de la ESA que estudia la viabilidad y definición del proyecto, explica que se trata de demostrar la capacidad de mover un asteroide y cree que los esfuerzos internacionales están convergiendo. "Para determinar con mayor precisión la órbita de Apofis", comenta, "nuestra misión tiene un papel. Podríamos mandar la nave que se pondría en órbita del asteroide."

Gálvez coincide con Sansaturio en la importancia de divulgar el tema sin sensacionalismo: "Cuantos más objetos se descubren más se debe educar a la gente para que entienda los riesgos y las soluciones".